El Cine Madrigal estrena en Granada 'Cerrar los ojos', la nueva película de Erice

Cine

El espacio de Carrera de la Virgen ha programado dos sesiones diarias para la cinta, rodada en la Costa

Mañana, el director regresa a San Sebastián para recoger el Premio Donostia

Miguel Navas

28 de septiembre 2023 - 13:26

Llegó el día. Mañana Cerrar los ojos, el regreso al cine de Víctor Erice tras tres décadas, regresará a la provincia donde nació. La película, rodada en varios puntos de la Costa Tropical, se estrena comercialmente este viernes, aunque en la capital solo podrá verse en el Cine Madrigal, en Carrera de la Virgen.

El cine proyectará la cinta en un pase doble, a las 19:00 y 22:00 horas, con un precio de cuatro euros (cinco los viernes y fines de semana). Con este estreno, además, el espacio pone punto final a su particular 'ciclo Erice', después de haber proyectado El espíritu de la colmena (1973) y El sur (1983).

La película, con José Coronado y Ana Torrent en el reparto, se centra en un famoso actor español, Julio Arenas, que desaparece durante el rodaje de una película. Aunque nunca se llega a encontrar su cadáver, la policía concluye que ha sufrido un accidente al borde del mar. Muchos años después, esta suerte de misterio vuelve a la actualidad a raíz de un programa de televisión que pretende evocar la figura del actor, ofreciendo como primicia imágenes de las últimas escenas en que participó, rodadas por el que fue su íntimo amigo, el director Miguel Garay.

Cerrar los ojos llega a salas tras un paso de lujo por varios de los principales festivales de cine, incluyendo San Sebastián (también mañana el director recibirá el Premio Donostia) y Cannes, llegando incluso a ser una firme candidata a representar a España en los Óscar, honor que finalmente disputará La sociedad de la nieve, de J. A. Bayona, también con escenarios de la provincia.

Ese paso de lujo lo dejó claro el delegado general de Cannes, Thierry Frémaux, quien aseguró que "la obra de Erice no es solo importante para el cine español, también para el cine internacional". Esa importancia quedó demostrada ya desde antes de la proyección, cuando varias horas antes se podían apreciar colas de persona en la sala Debussy para ver una película que dura casi tres horas y que supone el regreso del cineasta vasco al festival tras El sol del membrillo (1992), que se llevó el Premio del Jurado.

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