Es una cantante de jazz que a su vez tiene una gran influencia de la música brasileña, sobre todo de la bossa nova. La artista Cristina Mora cierra hoy la Feria del Libro con un concierto en el Corral del Carbón, a las 20.30 horas, en el que ofrecerá al público el repertorio de su trabajo discográfico Bajo la piel, editado el pasado año en la discográfica gallega Free Code Jazz Records.

Acompañada a la guitarra por Guillermo Bazzola, al contrabajo por Carlos Ibáñez y a la batería por Juanma Barroso, la vocalista pondrá voz a las letras creadas por su madre, la poeta cordobesa Ángeles Mora en un concierto que se enmarca en el ciclo Música en los monumentos que organiza la Junta de Andalucía.

Pero en su repertorio también incluirá alguno de los standards del álbum, entre los que destacan Softly, as in a morning sunrise, Fly me to the moon o Cry me a river. Así, el sonido estará "en la órbita del jazz y la música brasileña, con el plus de originalidad de estar cantado en castellano", según explicó ayer la cantante y compositora.

Ya hacía tiempo que algunas cantantes de Cataluña venían interpretando jazz en catalán y, ¿por qué no hacerlo también en castellano? Esto es lo que llevaba tiempo pensando Cristina Mora y lo que le hizo ponerse a trabajar en ello: compuso los temas y con la ayuda de su madre escribió las letras para las canciones que hoy pondrán oficialmente el punto y final a la vigesimoseptima edición de la Feria del Libro de Granada.

Bajo la piel, que fue grabado en 2005 con los músicos Germán Kucich, Fender Rhodes, Paco Charlín y Juanma Barroso (y con la colaboración de Manuel Machado, Dan Rochlis y Guillermo Bazzola) es su proyecto más ecléctico al tener como punto de partida al jazz sin que por ello deje de verse influenciado por otras corrientes musicales.

Y es que las influencias de la artista van desde los músicos de jazz y brasileños, al pop rock: Chet Baker, Eli Regina, Led Zeppelin y un largo etcétera de reconocidos artistas.

Con estas referencias, Mora ofrecerá un recorrido por diferentes estilos, lleno de matices y colorido. En él, la voz dulce y susurrante de esta cantante se verá inmersa en un universo musical de una gran riqueza rítmica y armónica. Y es que, no en vano, su primer trabajo discográfico es, en definitiva, un proyecto diferente para un país en el que el jazz ya se ha fusionado con otros estilos como el flamenco, pero que aún no había transitado por estos senderos.