Los únicos artistas españoles que formaron parte del movimiento expresionismo abstracto americano, Esteban Vicente y José Guerrero, confluyen por primera vez en una exposición que acoge Segovia y supone un diálogo entre el genio y la y trayectoria de ambos. 

El director de Programación de Acción Cultural Española, Santiago Herrero; el presidente del Museo Esteban Vicente, Francisco Vázquez; la directora conservadora del mismo y una de las comisarias, Ana Doldán; y el director del Centro José Guerrero y comisario, Francisco Baena, han presentado esta mañana la muestra.

Doldán ha explicado que este trabajo expositivo "pionero" a nivel nacional pretende reflejar la similitudes y diferencias de ambos artistas, que compartieron escenarios y comenzaron con una figuración renovada centrada, en especial, en los paisajes urbanos.

Inauguración de la muestra.

Un segundo momento estuvo marcado por su acercamiento a la abstracción y la atracción que sentían por los colores y las formas, en gran medida debido a la influencia parisina a la que se vieron sometidos hasta que desembocaron en los dictados del expresionismo abstracto americano.

En esta época, las obras de Vicente (Segovia, 1903) eran cercanas a la pintura de acción, pero con una visión mucho más lírica y poética, mientras que el tono empleado por Guerrero (Granada, 1914) era más dramático y se decantaba por tonos más oscuros como los tierra o los burdeos.

En la tercera sala de la exposición se pueden ver los ensayos experimentales de ambos y el uso de la técnica del collage, por parte de Vicente, o del grabado en el caso de Guerrero.

Su última etapa profesional, presente en las salas cuatro y cinco del museo, se caracteriza por la explosión del color, aunque mientras Guerrero lo utilizaba como elemento que estructura la composición, el segoviano lo empleaba, junto a la saturación, para atrapar la luz, convertir lo estático en dinámico e impregnar de emoción la obra.

La muestra la componen 66 piezas: 30 de Esteban Vicente; 33 de José Guerrero; dos lienzos de Joan Miró, Leyenda del Minotauro y París, 2 de octubre de 1948; y un collage de Juan Gris, estos últimos como muestra de la influencia que dejaron en los artistas.

Por su parte, Baena ha destcado que a través de esta exposición se ha conseguido un diálogo "muy fluido" y "natural". El director del Centro Guerrero también ha incidido en la importancia de juntar en un mismo espacio estas dos miradas que "expresan las mismas ideas y problemáticas a través de sus propias sensibilidades".

La directora del Museo de Arte de Segovia, Ana Doldán, y el director del Centro Guerrero, Francisco Baena, ayer en la exposición.

El director de Programación de AC/E, Santiago Herrero, se ha referido a lo "bello y especial" de este proyecto de dos artistas que ha calificado de "internacionalistas", y ha recordado que permanecerá hasta el 2 de junio en Segovia; del 20 de junio al 22 de septiembre en el Museo de Bellas Artes de Asturias; y a partir del 10 de octubre en el centro José Guerrero.