El pintor granadino Ignacio Belda Mendoza falleció ayer a los 79 años después de una larga enfermedad y tras una vida dedicada a la pintura y a la difusión de la cultura desde diversos puestos en la Obra Cultural de la Caja General de Ahorros de Granada, en los que promovió los Certámenes Provinciales de Pintura al Aire Libre. Su obra se encuentra en diversas colecciones nacionales y extranjeras y su última exposición en Granada tuvo lugar a principios de 2014 en la sala Zaida de Caja Rural, donde mostró diversos paisajes del Albaicín bajo el título Nocturnos de Granada. También fue concejal del PP en el Ayuntamiento de Granada y, en la década de los noventa, se puso en la piel del rey Melchor para la tradicional cabalgata del 5 de enero.

Ignacio Belda nació en Granada en 1935 y llegó a la pintura por influencia de su hermano Fernando. Después tomó lecciones de Nicolás Prados López, Manuel Maldonado y Del Moral.

Desde sus comienzos se distinguió por un sentido moderno de su pintura. Muy joven obtuvo premios en distintos certámenes juveniles y colectivos de la Granada de los años 50. En la década de los 60 se dedica a la pintura mural destacando su obra en la cafetería Maïer y en colecciones particulares.

También participó en varios concursos del Ayuntamiento de Granada, obteniendo el primer premio de los carteles anunciadores del Corpus Granadino en los años 72 y 73. Ha celebrado numerosas exposiciones individuales en Granada, Jaén, Murcia, Valencia, Almería y Sevilla, en la que obtuvo el premio convocado por la Federación Andaluza de Cajas de Ahorros.

Próximo al realismo, siempre se consideró un hombre vinculado a la vida artística granadina y llegó a confesar su admriación por el trabajo de Jesús Conde y "buen amigo" de Rodríguez-Acosta.