Martinete del rey sombra
Todo sobre el martinete
Fernando de Villena, poeta
Granada/-El libro esta dividido en cinco partes, ¿de qué trata cada una?
-Sí, cada una de esas partes se corresponde con un periodo de mi existencia y de mi obra: los principios, la primera madurez, la plenitud, las sombras del otoño de la vida y la mirada de la senectud. Siempre, en mi vida y en mi obra he tenido una visión cíclica.
-¿Qué es lo que le ha llevado a hacer una antología?
-Soy un poeta no sé si marginal o marginado y nunca he podido publicar en editoriales grandes. Por ello, mis libros no son fáciles de encontrar. Las ediciones eran casi siempre muy reducidas. Por eso, esta antología que los entusiastas y amabilísimos editores de Baker Street han tenido la gentileza de publicarme, puede servir para conocer un poco toda mi trayectoria desde 1980, cuando comencé mi andadura, hasta el año 2020.
-¿Cree que su estilo en la lírica ha ido cambiando a lo largo de su carrera?
-Soy un poeta con diversos registros, aunque todos poseen un sello propio. Me gustan los autores cuya obra evoluciona o cambia como son Juan Ramón Jiménez o Manuel Machado. Yo comencé imitando a los poetas del siglo de Oro y a los grecolatinos, después sentí la fascinación del Modernismo y poco a poco me fui depurando y ahora escribo una poesía reflexiva y marcada por el desengaño.
-¿Hay algún poeta que haya influido en su estilo?
-He sido un grandísimo lector. Mi biblioteca cuenta con más de veinte mil ejemplares y he recibido influencias de cientos y cientos de autores. Por citar algunos, nombraré a Minermo, Horacio, Boecio, Dante, Aldana, Carrillo de Sotomayor, Góngora, Soto de Rojas, D´Annunzio, Rilke, Pablo del Águila o mis amigos del grupo Anade. Todo escritor que se precie debe buscar su Diferencia y por ello sus lecturas no deben limitarse a las obras de sus contemporáneos.
-Sus poemas están llenos de simbolismos de la naturaleza ¿Qué significa esta para usted?
-La naturaleza es nuestra maestra en conformidad. Observándola acabamos aceptando nuestro destino. El hombre de hoy vive cada vez más alejado de la naturaleza y ello lo lleva al desasosiego y a la frustración. Ahora incluso se pretende desde la oficialidad imponer una poesía urbana. No digo con esto que las ciudades carezcan de poesía, sino que el hombre fue creado para estar en comunicación con la naturaleza y ello es lo prioritario.
-También hace numerosas referencias a la religión ¿A qué se debe?
-Dios me ha concedido el inmenso regalo de la fe y yo soy muy agradecido. Me educaron en la más hermosa y la más comprensiva con el hombre de las religiones y me siento muy dichoso de ello, aunque, por supuesto, respeto todas las creencias y todas las opiniones siempre que se expresen con educación.
-¿Qué es lo que le inspira a escribir poesía?
-Escribir poesía es acendrar la existencia, quedarse con el alma de lo vivido, con lo esencial. Los días están llenos de horas que carecen de sentido, de belleza o de misterio, pero de repente percibimos una señal en nuestra sensibilidad que nos alerta de algo diferente, inexplicable, efímero pero que puede ser imperecedero, y entonces hay que escribir lo antes posible.
-Cual es el poema del que está más orgulloso o que signifique más para usted en toda la antología ¿Por qué?
-No puedo escoger uno en concreto de mis poemas pues ello supondría una traición para todos los restantes. Bastante traición supone ya realizar una antología en la que se descartan muchos de los escritos de una vida. De cualquier modo, a mí me complacen los siete libros que dediqué al Mediterráneo pues fueron escritos en el cenit de mi existencia.
-¿Todos los poemas de este libro pertenecen a libros publicados?
-Sí. Guardo inédito otro libro, pero no tengo prisa en publicarlo.
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