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'Granada en Off presenta'... a Dominique A

  • El francés regresa a España tres años después de su última gira en un momento vital de su carrera Coincide con la presentación de su último disco hasta la fecha con la reedición de todos sus álbumes anteriores

Con el concierto del francés Dominique A y los sevillanos Löbison, antes Falso cabaret, arranca mañana, domingo 13 de enero de 2013, en el Auditorio Manuel de Falla, a las 19:00 horas, la esperada programación del ciclo 'Granada en Off presenta' que la Asociación Granada en Off organiza en colaboración con la Asociación Granada en Vivo y diversos promotores locales.

El francés regresa a España tres años después de su última gira, en un momento vital de su carrera, al coincidir la presentación de último álbum hasta la fecha, Vers les Lueurs, con la reedición de todos sus álbumes anteriores, lo que ha convertido 2012 en un año muy significativo para el compositor, que ha afirmado: "Fue muy especial. Lloré todas mis lágrimas cuando el año acabó. Todo ha sido increíblemente positivo durante el año: la recepción del último LP, de los conciertos, de las reediciones. Además, un montón de gente ha descubierto ahora mi trabajo. Ha sido mi mejor año". La reedición de su obra anterior bien podría haber ensombrecido el lanzamiento de su nuevo material, pero Dominique A confiaba plenamente en él: "No estaba preocupado, encuentro interesante tender un puente entre el pasado y el presente. Sabía que el último disco es una obra sólida. Siempre confío en las reacciones de la gente que me conoce bien cuando toco material nuevo y en esta ocasión las reacciones eran más fuertes que nunca".

No se equivocaban, Vers les Lueurs ha recibido una excelente acogida por parte de público y crítica. El francés "quería hacer un disco ambicioso pero sin los posibles problemas creados por esa ambición, sin dificultad para acercarse al oyente. Quería ser claro y sencillo y tenía la idea de una gran banda tocando en directo con el contraste de los instrumentos acústicos y eléctricos, así que, junto al arreglista David Euverte, mi pianista, tomé la decisión de usar un quinteto de viento para el disco. Queríamos un sonido especial y pensamos que el quinteto de viento-madera no era demasiado habitual en la música pop. Para el directo, aunar el formato habitual de banda de pop y el quinteto es una fórmula cara, al menos para pensar en una gira larga, aunque hemos hecho bastantes conciertos con esa formación".

Vers les Lueurs es solo la última referencia de una muy extensa discografía, su éxito invita a Dominque A a mirar con benevolencia al futuro y, según parece, también al pasado: "Al mirar atrás veo que atrás no es atrás: atrás está aún aquí, incluso aunque yo haya cambiado, aún comprendo al niño que escribió la canción Le courage des oiseaux. Siento que mi camino es una carretera sin final con la que yo nunca habría osado soñar cuando era más joven. Mi única meta al principio era grabar un disco y tener alguna vez en mi vida una buena crítica en la prensa musical, así que podemos decir que esta historia ha ido mucho más lejos de lo que jamás habría imaginado".

Sin grandes razones para el arrepentimiento, a pesar de los tropiezos, Dominique A hace balance: "Mi segundo disco no fue muy bueno. En aquel tiempo no estaba seguro de querer hacer una carrera, era algo nuevo para mí y no era lo bastante valiente para admitir que quería pasar toda mi vida siendo cantante. Tout sera commeavant, de 2004, estaba sobreproducido, pero si no cometes algunos errores, quién va a cometerlos por ti. Es importante equivocarse alguna vez para encontrar finalmente lo que está bien. Así que puedo decir que no me arrepiento de nada en absoluto y estoy orgulloso de mi trabajo, especialmente de La fossette, L'horizon and La musique. Del último disco aún es pronto para saberlo. Creo que es bueno pero tal vez en unos años escupa sobre él".

Nos resulta difícil pensar en algo así a tenor de la exitosa trayectoria de un álbum que nos lleva a interesarnos por el estatus de Dominique A en la escena pop europea: "Fuera de Francia, España, Bélgica, Suiza y parte de Alemania, no tengo una posición en la escena pop europea. Mi música no cruza fronteras, tal vez sea demasiado francesa. Ignoro porqué gusto tanto al público español, solo puedo disfrutarlo"; y por la consideración de la música francesa en dicha escena: "Cuando cantas en francés, cualquier cosa que hagas va ser condenada a lucir la irrisoria etiqueta de chanson française y no puedes hacer nada contra eso. El sonido del lenguaje, su escasez fonética, crean ese fenómeno, eres un condenado cantante francés hasta que te mueras. Serás comparado con Brel, Ferré, Brassens, Barbara, Gainsbourg y, desde hace unos años, Bashung.

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