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LAPIDO vuelve a golpear

José Ignacio Lapido regresa al estudio de grabación para preparar su nuevo disco, el que hace el número seis de su carrera musical. Aún no tiene título. Pero promete ser una gran sorpresa. "Es la primera vez que alguien que no soy yo lo produce", dice, refiriéndose al ingeniero de sonido y productor alemán Paul Grau que, desde que se afincó en Motril y abrió su estudio Gismo7, se ha convertido en uno de los más deseados de todo el país.

El nuevo trabajo de Lapido contiene catorce temas y títulos tan sugerentes como La hora de los lamentos, tema en el que canta Miguel Ríos, Enmedio de ningún lado, Lo creas o no, El más allá, Nadie espera o Antes de morir de pena, entre otros. El guitarrista y cantante granadino vuelve a estar acompañado de su banda de siempre, integrada por Popi González a la batería, Paco Solana al bajo, Víctor Sánchez a la guitarra y Raúl Bernal a los teclados.

La banda ha pasado tres semanas en los estudios de Paul Grau y aún le queda otra más. No faltarán invitados de lujo, como Quique González, que se acercará a Granada en los próximos días para grabar.

"Hay temas de todos los estilos y para todos los gustos", dice Lapido. Eso incluye baladas, canciones de tiempos medios y algún que otro tema furioso. El disco, que es una autoproducción, será publicado en el mes de noviembre en el sello del propio guitarrista, Pentatonia Records. Quienes han presenciado algunas de las sesiones de la grabación aseguran que se trata de un trabajo que impactará a sus fans y atraerá a nuevos amantes del rock profundo y reflexivo del músico granadino, uno de los mejores letristas que hay en el panorama rockero español.

Lapido vuelve a golpear las conciencias con sus letras, a mirar el mundo desde el lado de los perdedores que se niegan a fracasar y a lanzar sus dardos irónicos sobre un sistema que se recocija sobre sí mismo sin tener nada interesante que ofrecer. La de Lapido es la conciencia de la vida.

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