El próximo 11 de marzo todas las miradas y los oídos de la escena musical española apuntarán hacia Loja. El día es el elegido para el lanzamiento del tercer y más esperado álbum de Lori Meyers, la banda granadina que revolucionó hace cuatro años el sonido indie en este país y que afronta ahora su consolidación definitiva con un nuevo trabajo del que ya se puede escuchar un pequeño adelanto a través de internet.

Serán trece canciones con raíces en el clásico sonido pop luminoso del que Lori Meyers hace gala desde aquel Viaje de estudios con el que iniciaban su aventura en esto de la música. Pero desde entonces han cambiado tanto las cosas que, en esta ocasión, y a falta aún de más de un mes para la edición del álbum, la banda tiene ya cerrada una veintena de fechas de conciertos por toda España. Así, la gira recorrerá todo el territorio nacional a partir del próximo 4 de abril, donde tiene prevista una actuación en el Círculo del Arte de Toledo, y seguirá hasta el 31 de mayo, donde se pondrá el cierre en la sala La Vaca de Ponferrada (León). La parada en casa llegará de las primeras, el 17 de abril en la sala Industrial Copera, un lugar que cada vez se queda más justo de espacio para los chicos de Lori Meyers.

Noni, Alejandro, Sergio y Alfredo se encerraron el pasado mes de octubre en los estudios Gismo 7 de Motril para dar forma a un álbum donde no se ha escatimado ni en esfuerzos ni en recursos. Fue un mes de trabajo junto al productor Ken Coomer y el ingeniero de sonido Charlie Brocco para sacarle el máximo esplendor a unas canciones que se mezclaron en Nashville (Tennesse) y que terminaron de masterizarse en Nueva York de la mano de Greg Calbi, uno de los grandes artífices de hacer que suene rabiosamente bien muchos de los clásicos del jazz y el rock americano. Eso por dentro, porque por fuera el trabajo le ha tocado a la diseñadora Vanessa Zafra, que vuelve a repetir poniendo dibujos a dando color a una edición que, según adelantan, "cuenta con diversas novedades y sorpresas".

Por el momento, tan sólo se puede escuchar en la página de myspace de la banda Luciérnagas y mariposas, una canción donde vuelven a brillar las voces a coro dentro de una melodía intensa que avanza un paso más en la madurez del sonido ya propio de los cuatro Lori Meyers. Ellos mismos lo avanzaron tras su fichaje por Universal Music y la reedición con ellos de su Hostal Pimodan: el tercer disco tenía que ser algo "perfecto". Sin poder escucharlo al completo, todo parece indicar que la banda está llamada a consolidarse definitivamente con él dentro del pop español, así como a abrirse nuevos caminos en la experimentación con los sonidos.

Pese a su juventud, las andanzas musicales de Lori Meyers no tienen nada que envidiarle a las de grandes del indie nacional como Sexy Sadie, Sidonie o The Sunday Drivers. Desde que se alzasen en 2005 con el premio Ojo Crítico de la Música Moderna que entrega cada año Radio Nacional de España, la carrera de Lori Meyers no hizo más que subir. El Viaje de estudios de su debut generó tantas expectativas como éxitos debido a la frescura de cada una de sus canciones, mientras que Hostal Pimodan vino después a reivindicar que todo lo bueno que les estaba pasando a estos chicos de Loja no era fruto de la casualidad.

Una infinidad de conciertos por toda España y la participación encendiendo la temperatura en los festivales de verano más importantes -del Metrorock o el Primavera Sound al todopoderoso Benicàssim- se ha sumado en este tiempo a todos los piropos que las revistas especializadas no han parado de lanzarles y de los que tienen buena parte de culpa canciones como Tokio ya no nos quiere, Mujer esponja, Dilema, El aprendiz, Televisión y ahora ya también la nueva Luciérnagas y mariposas.

Mientras llega el 11 de marzo, los pequeños regalos de internet van adelantando lo que está por venir. Ya en su día no dudaron en poner a Jota (Los Planetas) bajo los palos de una portería para tratar de parar un penalty generacional y a Antonio Arias (Lagartija Nick) como inflexible árbitro de ese partido. Con el listón así de alto queda ya sólo por ver qué nuevas perversiones se les ocurren para futuros videoclips.