El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, ha reivindicado interpretar la cultura como una vía de educación y conciencia crítica y no solo de entretenimiento para que el sector supere la crisis y ha apostado por aprovechar el ingente mercado en español de un mundo global. El poeta granadino, que este martes participa en el ciclo de conferencias Después del Covid-19, ¿qué? de la UGR, ha dado contexto a la crisis del sector cultural en un escenario previo con presupuestos reducidos y prorrogados.

"Lo que pasa en el mundo cultural es que llueve sobre mojado", ha dibujado García Montero, quien ha recordado que las inversiones en cultura están "muy por debajo" de las de países cercanos como Francia o Alemania. Desde la sede del Instituto Cervantes de Madrid, García Montero ha recalcado que la actual pandemia llega en una situación "difícil", con un presupuesto arrastrado desde 2017 y el efecto de recortes previos que dejaron un sector "muy debilitado".

Como ejemplo, ha recordado que la institución que dirige recibe 61 millones frente a los 400 del instituto francés, cifra que supera el Goethe alemán, lo que evidencia la diferencia presupuestaria y de inversiones culturales en distintos países europeos.

"Hace 40 años, cuando publiqué mi primer libro, la cultura era educación, imaginación y conciencia crítica, estaba identificada con formar a la ciudadanía. Pero los pensamientos neoliberales de ahora la han convertido en entretenimiento, en entretenimiento barato", ha lamentado el poeta, que apuesta por recuperar el concepto educativo.

El director del Cervantes ha analizado la huelga o apagón digital de este pasado fin de semana, apoyado por parte del sector cultural, y que ve tan comprensible como desacertado. "Lo entiendo porque es un sector que lleva mucho tiempo en una situación difícil, con gente que no puede desarrollarse porque no hay ayudas como en otros países, pero también suena a chiste porque, ¿cómo se apagan las redes?", se ha preguntado García Montero, que hubiera preferido reivindicar reuniones con el ministro del ramo frente a algunas "opiniones destempladas".

"La cultura no es un lujo o un decorado"

Según García Montero, en medio de una crisis en la que muere gente, el sector debería apostar por trabajar unido, junto a las instituciones, "con propuestas como ha hecho siempre", y evitar el peligro de generar una mala imagen para el mundo de la cultura y críticas a la petición de ayudas. "Hay que convencer al tejido social de que la cultura no es un lujo o un decorado, sino que es importante, que es formación y no solo entretenimiento", ha resumido antes de apostar por afrontar el futuro desde una alianza de los países de habla hispana, porque esa cultura en español influye en la economía o el turismo.

"Debemos alejarnos del papanatismo y defender la cultura en español, el cine, la literatura, y tomarla en serio", ha sentenciado el director del Cervantes, que ultima ya la apertura de la sedes de Shanghái y Pekín tras la pandemia.