Carlos Blanco, el decano de los guionistas españoles, autor de los libretos de Locura de amor (1948), de Juan de Orduña, o Los peces rojos (1955), de José Antonio Nieves Conde, falleció ayer el domingo a los 96 años de edad. Gijonés de nacimiento y autor de más de una veintena de guiones entre 1946 y 1976, Blanco llegó a trabajar en Hollywood para Columbia, RKO y la Fox. "Siempre se habla de Buñuel, Berlanga y Bardem, pero Blanco era la B oculta del cine español", dijo ayer el productor y guionista Alfonso S. Suárez, autor del documental La voz negra: Conversaciones con el guionista Carlos Blanco.

Blanco, que recibió en 2004 la Medalla de las Bellas Artes y en 2001 fue homenajeado por la Seminci de Valladolid, tuvo una vida "que da para varios guiones", sostuvo Suárez. Combatió en las filas republicanas en la Guerra Civil y estuvo en la cárcel desde 1939 hasta 1944. Fue asiduo de las tertulias del Café Gijón, donde trabó amistad con Buero Vallejo, Jardiel Poncela, Miguel Mihura o Jose Luis López Vázquez. Con la llegada de la democracia, su obra queda arrinconada; muchos profesionales del sector la consideraron, paradójicamente, próxima al franquismo. En una de sus últimas entrevistas, hace años, Blanco afirmó que echaba en falta una película "seria, triste, dramática y melancólica" sobre la Guerra Civil, frente al tratamiento "folclórico" que suele imperar.