Después del apoyo unánime de todas las salas de conciertos de la ciudad y la protesta pública de cientos de personas relacionadas con la vida cultural en la ciudad, la sala Planta Baja vuelve ya a abrir sus puertas, aunque lo de la música en directo tendrá que esperar aún algo más, según confirmaron ayer a este diario los responsables de las actuaciones de la sala.

Planta Baja retoma desde este fin de semana su programación habitual de sesiones con los mejores dj's del sello Microsurco y la invitación en firme de hacer de cada noche una larga oportunidad para disfrutar de la música en compañía de los amigos. El problema está, precisamente, en aquello que ha hecho célebre a la sala en la cultura de este país: los conciertos. Pese a los continuos intentos por parte de sus dueños, la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada se mantiene por el momento firme en su decisión de cerrar la sala a la música en directo debido al incumplimiento de la normativa vigente, y eso también pese a la petición de los responsables de otras salas andaluzas de que la normativa se aplique con más flexibilidad en casos de interés público y que se hagan excepciones puntuales en pro de reconocer una trayectoria de sobra demostrada.

A esto se añade que Planta Baja está a punto de cumplir su vigésimo aniversario, que iba a suponer una fiesta de la música por todo lo alto que reuniría en el escenario a bandas que han sido el germen del rock granadino y que llevan varios años desaparecidas. Por el momento, los conciertos que ya estaban cerrados se están trasladando a otras salas como La Telonera de Armilla o Booga Club.