Los Sabineros interpretan a su ídolo en el Madison

El argentino Mario Ojeda recaló en Granada hace más de doce años y por entonces ya atesoraba una larga experiencia como músico, autor y productor. Aquí encontró cobijo entre los muchos aspirantes a cantautores de la escena, pero en su interior latía un corazón rockero con querencia por la guitarra eléctrica. Mario formaba parte de esa reconocida (aunque por aquí haya sido injustamente ignorada) tradición de rock argentino por derecho propio ya que había compartido escenario y estudios de grabación con nombres de la talla de Litto Nebbia, León Gieco, Raúl Porchetto, Lalo de los Santos, Tancredo, Moris, Rafael Amor, Luis Eduardo Aute, Adrián Abonizio, Fito Páez y Juan Carlos Baglietto, entre muchos otros. Y a pesar de semejante hoja de servicios finalmente sería con Los Sabineros con los que acabaría por recorrer la península interpretando, a veces en clave de humor, otras manteniendo una exacta fidelidad a las originales, pero siempre de forma muy dinámica, el cancionero de Joaquín Sabina.

El grupo nace cuando Mario se cruza con el Flaco Rodríguez, un cantante y animador que se metía en la piel del homenajeado, como un Sabina granadino, que incluso ha cantado en la Plaza de las Pasiegas con Pancho Varona y Antonio García de Diego, músicos del trovador de Úbeda, y coautores de muchas de sus más celebres canciones. Juntos como Los Sabineros han convertido su afición en un modo de vida, actuando por las salas de toda España, no solo con el repertorio de Sabina sino también haciendo irreverentes adaptaciones de José Luis Perales, de Serrat, Luis Eduardo Aute, Raphael y hasta ¡Pimpinela! Como buenos buscavidas, Mario y El Flaco se adaptan a las circunstancias y lo mismo que actúan en formato dúo, cuando se lo pueden permitir se transforman en cuarteto. Mañana jueves repiten como dúo en el Pub Madison, dos personas distintas y solo héroe verdadero, Joaquín Sabina.