Ángeles Iradier y Juana Becerra se conocieron hace casi un año y desde entonces su amistad no ha hecho más que crecer. "Nos llamamos mucho porque ella vive en el Zaidín y yo en Cartuja y no podemos vernos tanto como querríamos", se lamenta Juana.

Relaciones como ésta es lo que quiere fomentar, entre otros fines, el Ayuntamiento de Granada con el proyecto Navidad en compañía. "Hacer amigos es uno de los objetivos del proyecto", explica la concejal de Familia y Bienestar Social, Ana López Andújar.

No obstante, la finalidad principal de la iniciativa municipal, que celebra este año su quinta edición, es que "ninguna persona mayor que no quiera estar sola en Navidad lo esté", añade López Andújar.

Y como si por algo se caracteriza esta época del año es por despertar la solidaridad y altruismo en las personas y entidades, serán las mismas residencias las que se hagan cargo de los costes de las estancias. Además, Sergesa Televida y Clece se han encargado de dar la información sobre el proyecto a sus usuarios, mientras que Aspogrades -empresa de transporte especializado- será la que traslade a los ancianos desde sus hogares hasta el centro más cercano y viceversa.

Este año, el número de plazas ofertadas por el Ayuntamiento de Granada es de 38 personas. Así, aquellos granadinos que tengan más de 60 años o sean jubilados mayores de 55 y puedan valerse por sí mismas podrán solicitar bien celebrar la nochebuena con otros ancianos, bien tomarse las uvas en la residencia o bien pasar toda la festividad en los centros.

Por el entusiasmo que muestran Juana y Ángeles, la experiencia es extraordinaria. "El año pasado, cuando dieron las campanadas, todo el mundo se acostó, pero nosotras nos quedamos con los auxiliares charlando y escuchando música", comenta Juana. Tan bien se lo pasaron estas dos granadinas que, no sólo van a repetir la experiencia, sino que se han encargado de dar a conocer el proyecto a todas sus amistades. "Es fabuloso, porque las personas que no pueden pasar las fiestas con sus familias no están solos", explica Ana. Están tan agradecidas que lo único que lamentan es que no se organicen actos de este tipo en otras épocas del año, aseguran entre bromas.

Aprovechando la presencia de la concejal y los representantes de las residencias, Juana y Ángeles han pedido volver a coincidir en el mismo centro y, ya de paso, han mostrado su interés por probar en esta ocación otro geriátrico.