A punto de cumplir un año desde su publicación, el tercer disco del rapero sevillano Manuel González Rodríguez, más conocido como Tote King, se presenta en vivo esta noche en la sala Industrial Copera. Un torbellino de rimas de un tipo que trabaja el rap a diario y que desde hace unos meses tiene estudio propio para que nadie más que él le administre las sesiones de micro.

-¿Qué recuerdos tiene de la época en la que vivió en Granada?

-Me encanta la ciudad. Siempre he dicho que si pudiera me compraría allí un keli de cabeza. Estuve cinco meses viviendo allí con un amigo de la infancia. Fue para hacer Un Tipo cualquiera, teníamos el estudio en Málaga y cogía el autobús.

-El carné de conducir no le va...

-No me interesa. Sé que podría cambiarme la vida, pero no me motiva. Es una putada porque muchos amigos míos viven en casas en pueblos cerca de Sevilla y podría ir a verlos o incluso buscarme yo una, con piscina y tal, pero no me lo planteo. Últimamente vivo haciendo sólo lo que me gusta.

-¿Y no hay cosas en la música que no le gusten pero que tenga que hacerlas por fuerza?

-Alguna cosa habrá, pero ya pasé la fase de ser mi propio manager, de tener que buscarme los conciertos y pelearme con los de la discográfica... Ahora puedo vivir como quiero, en la casa que quiero, con la chica que quiero y con mi propio estudio haciendo lo que quiero y trabajando en mis canciones todos los días. Es lo que siempre he querido.

-¿No tiene miedo a que se termine?

-Claro que sí. El miedo más grande que tengo es que vaya a una sala y la gente no responda como hasta ahora está respondiendo. La diferencia es que ahora no soy dependiente. Invierto en mí mismo, trabajo a diario en esto y tampoco tengo muchos gastos.

-¿Cuándo conoció a Randy, su actual dj?

-En el 96, con 16 ó 17 años. Yo iba al pueblo de ellos en autobús y en 1998, sacamos el primer disco de la Alta Escuela. Contar con él ahora es un lujo. Es un tipo echado muy para adelante, que le echa cara al asunto y me ha ayudado mucho. Aposté y él dejó su trabajo y ahora está volcado cien por cien en esto.

-¿En eso pesa más el convencimiento, o ha cambiado desde sus inicios?

-En aquella época yo estudiaba la carrera y Randy trabajaba, así que todos teníamos otras cosas y no podíamos dedicarnos de lleno. Ése es el problema. Cualquiera no puede vivir de esto y pagar facturas y comida. Si te llega, pues perfecto, pero no es fácil... Te obligas a echarle poco tiempo, a sacar ratos de cuando puedes y ahora es mi principal trabajo porque me da para vivir.

-Eso cuenta en Ahora vivo de esto... ¿Se refiere más al dinero o a la perseverancia en las metas?

-Hay un poco de las dos cosas. Cualquiera que me conozca sabe que no soy ostentoso, pero también es una crítica a esos que se reían de los raperos. Compañeros, gente del barrio, conocidos que te decían que eso de la música no daba para comer, que tenía muchos pajaritos en la cabeza, que me tenía que casar, que me sacara el carné... Es una pequeña venganza, pero también hay referencia a los que han seguido con sus discos y ahora los conciertos les permiten vivir.

-¿Mucho dinero o mileurista?

-No sabría decir exactamente porque depende de eso, de los conciertos. Los meses en los que toco mucho pues gano más y me llega para cuando estoy más parado de fechas pero que también pago mi alquiler. Puedo comer y soy feliz con lo que tengo, tampoco necesito mucho más. Soy feliz con mi conexión a internet, mis libros y mis películas.

-¿Cuál es el último libro que ha leído?

-Ahora estoy con el último de Coeetze y también ando con Vila Matas, Antonio Lobo Antunes y Roberto Bolaño.

-¿Nunca ha escrito una poesía?

-Que va... Es mi punto más flaco. No tengo esa sensibilidad poética que admiro mucho en los demás, incluso en los raperos que consiguen hacer canciones sobre eso. En las mías, no hablo del amor. Son más bien ensayos sobre las relaciones, pero nada que ver con poesía. Es como bailar, me da vergüenza.

-¿Los tipos duros no bailan?

-Al revés. Los que bailan o los que se atreven a escribir las poesías son unos valientes. Soy fan de los que se atreven a hacerlo y ellos son los tipos duros de verdad.

-De su anterior disco, Un tipo cualquiera, pasa a T.O.T.E., con las siglas de su nombre, ¿era un proceso de reafirmación?

-Se puede decir que sí. He pasado unos años muy malos. Con mi relación y con los problemas con mi propia cabeza. Trastorno obsesivo, y me estuve medicando un par de años. Todo me iba mal y me centré en el rap, que era lo único que aún me funcionaba. Por eso, lo de sacar pecho, lo veo ahora y creo es cierto. Pero no sé dónde está la chulería cuando hablo de lo peor de mí. Eso no lo ven.

-Tiene frases muy duras, como eso de espiar el móvil de su pareja...

-No sólo es chungo, es delito según me dijo un amigo abogado. Creo que no he cambiado en absoluto. Cuando me preguntan: "¿Sigues siendo Un tipo cualquiera?!", la respuesta es obvia... Por supuesto que sí. Se me ve de lejos. Es fácil saber como soy.

-Ya no sube sus nuevos temas al MySpace y, además, ha eliminado muchos comentarios...

-Es que los temas nuevos me están quedando muy chulos y prefiero guardármelos para el disco, la verdad. Lo de los comentarios es porque el 90% son iguales. "Eres el mejor, eres el mejor"... Y eso harta.

-¿Está harto de que le digan que es el mejor?

-Puede parecer raro, pero cansa. No le veo contenido. Me afectan mucho las críticas, sobre todo las malas, pero también me saturan mucho las adulaciones. No van conmigo. No las necesito.