Esto no ha hecho más que empezar

Hay amores que se gestan poco a poco. Hay otros que, pese al tiempo, nunca llegan a culminar. Y hay otros que son auténticos flechazos. Lo de Napoleón Solo es una cuestión 'de primera escucha'. Le pasó a Eric Jiménez, batería de Los Planetas, que se apuntó a formar parte del grupo -y eso que subía con creces la media de edad del resto de los músicos- porque le maravillaba la música que hacían. Le pasó también al equipo de El Volcán Música que fue a ver un concierto de la banda en la sala Planta Baja; apenas unas canciones y se rindieron -contrato incluido- a sus encantos. Y le sigue pasando a todo aquel que cada día descubre por arte de magia o del boca a boca cualquiera de los temas de Napoleón Solo en la Ópera, el disco de debut de la banda granadina que esta noche sonará en directo en el mismo escenario en que fue descubierta.

La especie de recopilatorio de estos dos años de música que es Napoleón Solo en la Ópera reúne once de los casi cincuenta temas que la banda tiene en su repertorio; y desde la explosión de colores de Lolaila Carmona hasta la adictiva Tiene que acabar hay lugar para un poco de todo. "Creemos que es un disco muy variado en el que cambiamos bastante de registros y con el que nos lo estamos pasando muy bien", cuenta Alonso Díaz, voz, guitarra y artífice del sonido de Napoleón Solo. Con él, Jaime Cordones (guitarra), Jose Ubago Bonaparte (bajo), Miguel Ángel Díaz (teclados y sintetizadores) y Luis Jiménez (batería a tiempo parcial junto a Eric Jiménez) completan la formación que empezó con su myspace como "único medio" para mostrar sus canciones pero que está llamada a hacerse un hueco grande en la escena nacional.

Con la premisa de "hacer un disco que no se pareciese a nada", la banda entró hace unos meses al estudio bajo la batuta de Fino Oyonarte, uno de los grandes magos del sonido indie de este país, y que fue el encargado de darle "el toque preciso" a las canciones. "Fue fantástico porque iba con los deberes bien hechos y se sabía los temas a la perfección, así que todo fue muy fácil", recuerda la banda, que inició su andadura hace dos años tras la disolución de El Mito de Sísifo, el proyecto anterior de Alonso Díaz y que se había convertido en uno de los nombres habituales de todos los certámenes y concursos de Andalucía.

Desde entonces, han pasado muchas canciones y muchas horas de carretera con las que están empezando a ver cumplido su sueño de dedicarse de lleno a la música. "Tenemos nuestros intereses muy claros y lo que queremos es tocar, la música es lo primero en nuestra vida. Unas veces vamos a una sala en la otra punta de España y se llena hasta los topes y otras la cosa está más floja, pero en general estamos súper contentos con la aceptación que está teniendo el disco. Queremos que la cosa vaya poco a poco pero siempre a más, no nos interesa dar un pelotazo para caer luego en saco roto. Si en un concierto hay dos personas a las que le haya gustado nuestra música ya nos volvemos encantados", confiesan.

Tras su exitoso paso por plazas tan complicadas como Barcelona o el festival Palencia Sonora -donde abrieron el escenario a Los Planetas- y recién llegados de Madrid, donde acaban de rodar a las órdenes de Borja Crespo (¡Ay, Haití!) el videoclip de Lolaila Carmona, la banda prepara con ilusión un verano en el que se les podrá escuchar en el Low Cost Festival y en el Contempopránea. Que Josefina se vaya preparando para muchas noches en soledad.