La zona Norte de Granada cuenta la realidad de su barrio en la gran pantalla

El auditorio de Fundación Caja Rural acoge el estreno de varios cortos realizados por jóvenes de esta zona de la capital, mostrando una visión desprejuiciada de la misma

Un acompañamiento hacia un futuro mejor

Las protagonistas del documental proyectado durante la gala inaugural del Festival de Jóvenes Realizadores en Granada
Las protagonistas del documental proyectado durante la gala inaugural del Festival de Jóvenes Realizadores en Granada / Francisco Neyra/ PicWild

El Festival de Jóvenes Realizadores (FJR) ya no es tan joven. La cita cultural estrena su 31ª edición el próximo 19 de octubre, pero antes el equipo organizó ayer una gala para mostrar el trabajo de los realizadores más jóvenes que han encontrado, 30 niños del barrio de Almanjáyar que el pasado agosto participaron en un taller audiovisual y que han plasmado su aprendizaje en una serie de cortos en el que muestran la realidad del barrio visto desde la óptica de sus propios vecinos.

La Fundación Caja Rural, culpable de este proyecto junto a la asociación Almanjáyar en Familia (Alfa), acogió el estreno de este proyecto que busca "acercar el cine a esos lugares donde normalmente no hay una cámara ni una sala de cine", explica a este periódico Antonio Arenas, director del FJR, quien ve "fundamental" darle la cámara a los más jóvenes de la zona Norte para que "cuenten su realidad".

En el mismo sentido se expresa Juan Carlos Carrión, presidente de Alfa, para quien el taller audiovisual impartido por el FJR (concretamente por Julio Bolívar y Antonio Domínguez) es "un regalo", pues permite a los jóvenes del barrio "mostrar ese rostro que muchas veces no se ve" y les permite creer en sus capacidades y posibilidades y abrirles un nuevo horizonte de futuro.

De hecho, esto no va solo de cine. Arenas destaca especialmente del taller el hecho de que, más allá de lo que aparezca finalmente en pantalla, todo, los jóvenes de Almanjáyar "son los protagonistas". De repente, desarrolla el director, "alguien les hace caso, son importantes, toman decisiones, se sienten los dueños de su creatividad y de su tiempo".

Además, ahonda Arenas, el taller se realiza en agosto, un mes claramente de ocio, pero en el que muchas familias del barrio "no se van de vacaciones como muchas otras" y esta formación actúa como una especie de campamento audiovisual, ofreciendo ejercicios y actividades a los niños y niñas, algo en lo que coincide el presidente de Alfa, para quien el taller ofrece a estos jóvenes una alternativa al tiempo libre, el cual comparten también con su familia, que se ha volcado y apoyado a los más menores de la casa en su nueva aventura tras las cámaras, resalta Carrión.

Pero no solo los más pequeños, ayer se proyectó también el documental Calle arriba: tres historias del Distrito Norte, que narra la vida, "bonita pero dura" según Carrión, de tres mujeres mayores de esta zona de la ciudad, en la que ellas hablan y cuentan su visión de Almanjáyar, lo que ayuda a quitar muchos prejuicios del barrio, explica Arenas.

Juan Carlos Carrión acompaña a una de las protagonistas de la jornada a su entrada al auditorio.
Juan Carlos Carrión acompaña a una de las protagonistas de la jornada a su entrada al auditorio. / Francisco Neyra / Picwild

Una mirada libre e inspiradora

El director del festival destaca también cómo el aprendizaje durante el taller ha ido en las dos direcciones y que tanto Bolívar como Domínguez han sido maestros y aprendices. "Los dos insisten mucho en lo que han aprendido de los niños", explica a este respecto el director del festival.

Frente a los adultos, y especialmente los vinculados al mundo cinematográfico, que tienen una mirada más encorsetada de lo que es un plano corto o un contrapicado, los más pequeños tienen una mirada más limpia, más abierta, que para el director es "importante mantenerla hasta el final".

El taller mostró sus resultados este martes, pero la idea es continuar, algo en lo que vuelven a estar de acuerdo tanto Arenas como Carrión, apostando por esta formar de acercar el audiovisual a los más pequeños, de hecho desde el festival ya se baraja la idea de abordar en un futuro no muy lejano el mundo de la programación de un festival, algo que ronda la cabeza del director de la cita cultural desde hace tiempo.

"La idea es enseñarle a los chicos no solo a hacer películas, sino también a verlas y a programarlas y ponerlas en relación", argumenta Arenas, que considera que esto ayudará a los jóvenes a ser "espectadores más críticos y activos" con lo que se podrá estar más cerca de la utopía que vislumbran desde la organización, "que todo el festival estuviera programado por niños", concluye el director entre risas.

Un avance de la programación

Antes de que llegue ese momento utópico queda iniciar, y clausurar, la nueva edición del festival, que este año contará con la presencia de cineastas referentes del cine contemporáneo como Isaki Lacuesta (ganador del Goya en Granada por su codirección de Segundo Premio), que protagonizará el encuentro con realizadores y charlará con el también director Javier Tolentino (Un blues para Teherán) en Condes de Gabia el sábado 25 por la mañana, adelanta Arenas. También vendrá a la ciudad la cineasta alemana Helena Wittmann, que será protagonista de una retrospectiva completa e impartirá un seminario en la Facultad de Comunicación.

Irati Gorostidi, responsable de Aro berria, llegará a la ciudad con la mención especial del jurado de San Sebastián y participará en un episodio especial del podcast Ciberlocutorio, conducido por Andrea Gumes y Anna Pacheco, y grabado en directo dentro de la programación del Festival.

Junto a estos nombres, ya anunciados, la inminente edición del Festival de Jóvenes Realizadores traerá a la capital a Belén Funés (La hija de un ladrón y Los Tortuga), que también se dejará caer por la Facultad de Comunicación para una clase magistral de guion.

Una resaca feliz

El Festival de Jóvenes Realizadores tiene ante sí el resto de sacar adelante una programación doce meses después de uno de los años culturales más importantes de Granada, con la gala de los Goya en la capital y la éxito de Segundo Premio, que llegó a qudarse a las puerta de representar a España en los Oscar.

Ahora la cita cultural vive una "resaca feliz", como la define Arenas, quien pese a todo asegura que Granada sigue atrayendo rodajes, como el de La bola negra de Los Javis, algo que "hace cinco o diez años era impensable". Además, la proyección del talento granadino también es importante, como ejemplifica Cristalino, que ha vuelto a trabajar junto a Fernando Navarro en Golpes. "Lo vivido estos meses atrás ha abierto puertas al talento granadino, al equipo técnico, al creativo y eso es precioso y eso es lo que seguiremos intentando promocionar con el festival".

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