"Hay muchas noches de insomnio detrás de 'Demasiado soñadores"

Que Second vive uno de sus mejores momentos es un secreto a voces. Que se han dejado el alma en su nuevo disco -el quinto ya- y que están dispuestos a no bajar ni por un segundo el ritmo, también. A falta de más de diez días para que Demasiado soñadores vea la luz, los murcianos estrenan esta noche gira en la sala Planta Baja con un concierto "de precalentamiento" con el que quieren enseñar lo mucho que se puede evolucionar en esto de la música sin perder personalidad.

"Con este disco no nos hemos puesto ninguna meta, simplemente hemos hecho canciones que nos gustaban, sin más pretensiones... De hecho, hemos sido más libres que nunca para componer. Sabemos que tenemos que seguir trabajando como siempre y que esto es una carrera de fondo, así que este disco está hecho con todo nuestro cariño y hemos trabajado más que nunca en él", cuenta Sean Frutos, la voz de la banda.

Demasiado soñadores bien podría servir de resumen del momento tan dulce que atraviesa la banda, que sigue viendo "rayos de esperanza" en la escena musical de este país y que es capaz de pasar de la más absoluta oscuridad a la luz en apenas dos canciones. "En este disco hemos apostado por la variedad y el single, N.A.D.A., es un buen ejemplo. Es una canción que tiene sus influencias de la música de los 80, que tiene oscuridad pero también un estribillo que golpea. Creo que eso es una constante que ha caracterizado desde siempre a Second. Con este tipo de canciones hemos vuelto un poco a nuestros inicios, en los que hacíamos una música más parecida a ésta pero en inglés", destaca Frutos. Y es que el paso definitivo al castellano ha sido, posiblemente, el gran acierto musical del grupo, que ya con su anterior Fracciones de un segundo logró consolidar y confirmar su apuesta.

El proceso creativo de este Demasiado soñadores ha sido el más inmediato de toda la carrera de Second, tanto que sin parar ni un instante una de las giras nacionales más ambiciosas del pasado año, las canciones fueron poco a poco tomando forma entre noches de hotel y largas horas de carretera. "Ha sido un poco duro, porque desde el pasado mayo hasta enero no hemos parado y hemos ido haciendo las cosas por etapas, cuando podíamos, pero siempre activos", explica el cantante, que señala que para temas como Mañana es domingo, Muérdeme, Aquella fotografía o En pequeñas cosas ha sido "un poco cabezota" hasta conseguir exactamente el sonido y las palabras que quería: "Este disco tiene mucho trabajo detrás, muchas noches de insomnio y de tirar ideas a la basura para que al final salieran once canciones a la altura".

Tocado por la varita mágica de Raúl Lara en la producción, Demasiado soñadores se suma a la estela de los trabajos anteriores de Second, en los que la experimentación y el uso de todos los recursos posibles era algo casi obligatorio. "En esta ocasión hemos metido en algunas canciones cosas más electrónicas y sonidos más actuales, y creo que ese va a ser uno de los grandes cambios que perciba el público. Necesitábamos dar un salto respecto a lo que estábamos haciendo y no sólo en lo referente al idioma, sino también en lo instrumental. Nos gusta escuchar a los clásicos y por supuesto que tenemos influencias de ellos, pero también nos gusta mucho la actualidad y los grupos que ahora mismos están funcionando, así que buscamos también influenciarnos por lo coetáneo", asegura Frutos.

Demasiado soñadores saldrá a la calle el próximo 29 de marzo acompañado por un DVD con el concierto de fin de gira que ofrecieron hace unos meses en la sala Joy Eslava de Madrid que da testimonio del punto fuerte de la banda que responde a algo que les venía "pidiendo el cuerpo" desde hacía tiempo y que puede avanzar la posible grabación de un disco en directo en el futuro, aunque el principal objetivo pasa ahora por hacerse escuchar: "Nos gustaría que nos descubriese más gente, transmitir cada vez más y que la gente haga suyas las canciones".