Paco López descuelga el teléfono. Está viajando a Logroño y a su lado Nina duerme. Son días noctámbulos para ellos y el resto del grupo. Las giras fuerzan la máquina y solo permiten un descanso vampírico. Son la banda Morgan y se encuentran en una gira que los lleva de Norte a Sur sin descanso porque han concatenado el éxito sin pausa desde el lanzamiento de su álbum debut, Air y el nuevo trabajo, North. Este viernes estarán en Granada tras más de 100 conciertos en salas, teatros y festivales por toda la península, Irlanda o Gran Bretaña.

–Vuelven a la ciudad de la Alhambra después de cinco meses tras su paso por el Granada Sound.

–Sí, sí, la experiencia fue increíble la verdad. Un publicazo... como siempre en Granada. Todo fue muy divertido y nos gustó mucho. La de hoy es la cuarta vez que venimos.

–Le han cogido el truco al público granadino por lo que parece.

–[Risas] Más bien ellos nos han cogido el truco a nosotros.

–Esta vez llegan a una sala cerrada, a la Copera, ¿Dónde prefieren tocar en interior o en grandes escenarios?

–Cada escenario tiene sus particularidades y a nosotros como nos gusta tocar, a cada uno le encontramos sus cosas buenas. Como afortunadamente hacemos un poquito de todo nos lo gozamos siempre mucho.

–En relativamente poco tiempo Morgan se ha alzado como una de las bandas de referencia actualmente. ¿La presión empieza a pasar factura?

–La verdad es que no, porque nuestra manera de trabajar ha sido siempre con poca expectativa más que pasarlo bien y lo seguimos manteniendo. Es parte de la filosofía, disfrutar el momento.

"Tenemos ganas de que sigan pasando cosas. Cada día es un nuevo afán y nos encanta lo que nos está pasando”

–¿Y la presión de la industria?

–Tampoco existe, tenemos muchos amigos en este oficio y al final es un trabajo para disfrutar. Nosotros vamos a nuestro rollo pero con compañerismo. Lo que pasa es que no tenemos discográfica, la gente con la que trabajamos es parte de nuestro de equipo y por eso no sabemos lo que es tener presión por parte de la industria.

–¿Qué tipo de público percibe que es el suyo tras una gira de más de 100 conciertos?

–Hay un poco de todo porque los estilos que hacemos son bastante clásicos pero también a los niños les gusta mucho. Es un público muy abierto.

–Morgan cultiva varios géneros, ¿en un futuro se atreverían con algo como el trap?

–Estamos abiertos a cualquier cosa que al hacerla veamos que tiene sentido con lo que queremos decir. No me atrevo a cerrarme a nada, lo que sí pasa es que si algún lo hiciéramos habría que ver si nos encaja.

"No me atrevo a cerrarme a ningún género, lo que sí pasa es que si algún lo hiciéramos habría que ver si nos encaja"

–¿Qué mensaje quiere transmitir Morgan?

–Nada especial, simplemente lo que la canción esté contando en ese momento, a partir de ahí intentamos crear un ambiente que la arrope y la acompañe. Siempre algo sólido para que tenga sentido.

–¿Quién es el Sargento de hierro?

–Nina cuenta que es el personaje más duro del cine. La canción iba del tiempo, lo más duro que hay en nuestras vidas.

–¿Le temen al paso del tiempo como grupo?

–Tenemos ganas de que siga pasando la verdad. Cada día es un nuevo afán y nos encanta todo lo que nos está pasando durante estos años. Tenemos poca queja.

–Se mueven en varios géneros, en los directos en cuál se crece más la banda.

–No sabría decir, llega un momento en el que tocas las canciones tanto que intentas hacerlo lo más nuestro posible. Por eso da la sensación de que cada canción tiene que tener la identidad que tú le das. Si hay partes más de funk de los 70 no tiene por qué sonar así, si no al funk que hacemos nosotros.

–¿Tienden a improvisar?

–Sí, muchísimo. Hay partes cerradas y otras más abiertas. Otras en cambio llega por accidente. Es un concierto que tiene de todo.

–Si pudieran elegir una banda con la que irse de gira, cuál sería.

–Sería con los Rolling Stones sin lugar a dudas.

–¿Los de ahora o los de los 70?

–Los Rolling ahora mismo. Ellos sí que han sabido llevar el paso del tiempo, son un ejemplo a seguir.

–¿Y el nombre de Morgan de dónde salió?

–Pues nada especial... Llegaba el momento del primer concierto y de poner un nombre en un cartel y nos sentamos a decir nombres. Uno de ellos fue Morgan porque sonaba muy bien tanto en español como en inglés. Somos de los que pensamos que el nombre coge identidad una vez que pasando el tiempo.

–Por lo que cuenta son un grupo tranquilo, sin mucha pretensión.

–Pues sí, en general sí. Al final es un oficio muy intenso e intentamos compensar con la tranquilidad que podamos.