Rock ‘navideño’ para los pacientes de salud mental del Virgen de las Nieves

Manuel López conoce bien el entorno de la salud mental, es psiquiatra desde hace dos décadas del Hospital Universitario Virgen de las Nieves. Un médico comprometido con los avances en los tratamientos, pero también con la cercanía en el trato y cuidados de los pacientes. Gran parte de su vida la dedica a esta vocación, pero, al menos una vez en semana, cambia la consulta por un local de ensayo con su grupo Caraperro, versiones de rock que regaló un concierto en el patio de la planta de salud mental a pacientes y profesionales de estos equipos con temas clásicos de los Beatles, Maná o 091, referentes para ellos, de los que tocaron dos de sus éxitos, En el Laberinto y Tormentas imaginarias.

López es voz, guitarra y líder de Caraperro, y junto a él forman el grupo Florian Herrmann, pediatra de profesión y bajista; Félix del Ojo, que toca la otra guitarra y es médico de familia; y Alberto Guillén, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías de Informática y Telecomunicaciones de la UGR y percusionista, aunque en esta ocasión tuvo que cambiar la batería por el cajón para adaptarse al formato acústico que exigía en el entorno hospitalario.

López apunta que, con esta iniciativa, “todo son beneficios, ya que, a pesar de estar ingresados, con este tipo de actividades, las personas con problemas de salud mental pueden tener cierta percepción y sensación de normalidad, además, está demostrado que la música es un tratamiento, la musicoterapia es un buen complemento en el abordaje de muchas patologías, incluidos los trastornos mentales”.

Entre ensayos y actuaciones en salas granadinas, el grupo pensó en hacer este obsequio a los pacientes y a los sanitarios del área de Psiquiatría, Enfermería, Psicología y Trabajo Social que cada día los atienden. Un concierto dedicado a ellos, con diez temas seleccionados del amplio repertorio con el que cuentan y que finalizó con tres villancicos muy conocidos para que todos los asistentes los cantara, Feliz Navidad, Ande, ande, ande la marimorena y Los peces en el río.

“Hemos adaptado nuestro show habitual para hacerlo acústico, puesto que aquí en el hospital no podíamos tocar en eléctrico por lo que en el entorno hospitalario hemos optado por instrumentos acústicos, disminuyendo un poco el volumen para no molestar a pacientes ingresados”, incide Manuel. No hizo falta bajo y guitarras enchufadas, ni batería rotunda y contundente, la treintena de pacientes y los numerosos profesionales que iban apareciendo por el patio, vibraron y disfrutaron con la energía extrema de Caraperro, que despuntó cuando tocaron Escuela de calor de Radio Futura, La Flaca de Jarabe de Palo y No puedo vivir sin ti de Coque Malla.

Félix del Ojo también es médico, trabaja en el servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Jaén, y valora de forma muy positiva esta actuación tan peculiar. “Siempre hemos creído que hay que acercar la música a la gente y, más aún, a aquellas personas que tienen un contexto particular y que también merecen vivir este tipo de experiencias” resalta el guitarrista y añade que este concierto también está dedicado para los sanitarios que “trabajan durante estas fechas señaladas, como la Navidad, en los centros hospitalarios con una entrega máxima”.

El médico y músico habla con orgullo de su banda, Caraperro, a la que define “por tener múltiples influencias, desde Rosendo Mercado hasta Extreme, pero aportando siempre un toque particular a las versiones y a las canciones propias”.

Entre el entregado público también se encontraban el delegado territorial de la Consejería de Sanidad, Indalecio Sánchez-Montesinos, y la directora gerente del hospital, María Ángeles García Rescalvo, que compartieron este rato entre sonrisas y buena música.

El delegado de la Junta de Andalucía del ramo de Sanidad apunta que “es un momento para vivirlo de manera conjunta con los pacientes y los profesionales, una excusa perfecta para compartir lo que significa la inclusión, la mejora en los tratamientos y la esperanza, además de la importancia de continuar avanzando hacia una atención más humana, cercana y respetuosa con la dignidad de las personas con enfermedad mental”.

La responsable del centro subraya, entre tema y tema, que “es un acto más de humanización que sitúa a la persona en el centro y reconoce la importancia del bienestar emocional como parte inseparable de la salud, en esta ocasión, para llevar la música a los corazones de nuestros pacientes y de nuestros profesionales, más ahora, en estas fechas navideñas”.