Una felpa y una sonrisa son las señas de identidad de El Arrebato. El artista llega mañana a la sala Industrial Copera para presentar Campamento Labandón, su disco de "madurez". Pero también cantará todos los hits que le han convertido en uno de esos artistas que son tan familiares como una mesa camilla.

-En su último concierto en Granada cantó 'Carmen' de Los Chunguitos. También ha colaborado con Los Chichos y ahora acaba de grabar una canción con Los Amaya. ¿Pueden ser estos sus referentes?

-Son grupos que admiro muchísimo, sobre todo a Los Chichos, que son la banda sonora de mi niñez. Yo soy de un barrio muy humilde de Sevilla y eso sonaba por todas las esquinas. Pero mis refererentes como músico van más bien en la onda de Triana o Alameda, esos grupos de rock andaluz que siempre he escuchado más en casa.

-¿Ha notado que hay grupos que suenan extrañamente parecidos a usted?

-Imagino que son homenajes que me hacen. Está bonito y me siento orgulloso porque no se imita a nadie si no se admira o se valora su trabajo. Yo creo que es un reconocimiento y si humildemente he podido hacer algo de escuela en la música es algo que me hace ser feliz.

-Ahora la rumba se ha 'doctorado' pero hubo un momento en el que la gente miraba mal a los que escuchaban a Camela en el coche. Incluso Los Chichos, que hace décadas eran muy marginales, ahora son un grupo reconocido por todos.

-Los Chichos cantaban mucho a la marginalidad, pero es verdad que de un tiempo a esta parte está todo más normalizado. Supongo que los artistas que han cantado rumba en los últimos años también han contribuido, también ha cambiado la temática y hablamos más en positivo.

-¿Gracias a artistas como usted se han recuperado las canciones de Los Chichos o Los Chunguitos?

-Me gustaría pensar que sí. Igual que el flamenco, que gracias a la fusión mucha gente ha llegado al cante jondo. Hay que beber de los pozos y Los Chichos eran número uno en sus tiempos.

-Mucha gente dice que el nuevo himno del Granada CF se parece al del Sevilla CF que compuso usted. ¿Ha creado una escuela a la hora de componer himnos futboleros?

-El himno del Granada es muy bonito. Yo tuve mucha suerte porque hice el himno en un momento muy especial de la historia del Sevilla y ahora, cuando lo escucho, me doy cuenta de que es muy pasional, muy épico. Aunque parezca muy sencillo es muy complicado y creo que ahora no podría hacer algo igual. Creo que se marcó un antes y un después en los himnos del fútbol y salió así porque intenté hacer un himno que no se pareciera a nada anterior. A veces, cuando echo la vista atrás, creo que si por algo voy a ser recordado es por el himno del Sevilla, porque el chico del pañuelo tiene canciones muy bonitas, pero son más efímeras.

-¿Cantará el himno en el cierre de gira en Sevilla o no lo hará para no molestar a los béticos?

-Sí lo cantaré aunque es curioso que en Sevilla también canto poco. Sí lo hago porque no tengo problemas con los béticos, no tengo problemas con eso, una vez tuve uno pero fue algo muy aislado.

-En Andalucía oriental hay gente que siente cierto rechazo a las cosas que parecen muy 'sevillanas'. A diferencia de Siempre Así o José Manuel Soto, no parece usted el cantante oficial de Sevilla...

-Es curioso porque en Málaga, por ejemplo, cuando vienen las autoridades me dicen que no vaya a cantar el himno. Pero luego el público me lo pide al final del concierto. Es verdad que hay dos Sevillas, la de la gomina y luego otra más llana y del pueblo. Yo soy un sevillano de barrio, no soy un 'sevillita'. A veces se da una imagen distorsionada de Sevilla.

-A estas alturas tiene que tener una colección de felpas como para salir en el libro Guinnes.

-Tengo infinidad de felpas, lo que pasa es que soy muy maniático y sólo uso cuatro o cinco, soy muy supersticioso en eso. La gente me tira al escenario muchas felpas, en la calle me las cambian... Yo lo agradezco mucho porque antes estaban de moda y se compraban en todos lados, pero ahora voy a los hippies a comprarlas y no tienen.

-¿Piensa ofrecer en Granada una noche con arte?

-Llega El Arrebato en estado puro, con muchas ganas porque por desgracia he venido muy poco a cantar en Granada, creo que han sido dos veces.

-La última fue con Camela en el Palacio de Deportes hace cerca de ocho años...

-Pues desde entonces no he vuelto a Granada capital. Imagínese, tengo unas ganas tremendas para ver si puedo venir todos los años. Cantaré todos los temas de Campamento Labandón pero también haré un repaso por todos los hits de mi carrera, alguno se escapará pero canto todos los clásicos de El Arrebato porque el público no me perdonaría que no lo hiciera. Es un concierto muy simpático y muy pasional.

-El concierto, al ser en la Industrial Copera, permite a los espectadores irse a la barra del bar si hay una fase que no le llega. En los teatros no hay esa oportunidad y hay menos riesgo para el cantante de ver que la gente 'desfila' hacia el ambigú.

-Espero que no se vayan mucho a la barra del bar porque es cierto que la gente que me sigue lo hace de verdad. A lo mejor no soy el típico cantante que genera un fenómeno fan a su alrededor porque mi cara no da para más, las chicas no se vuelven locas, pero tengo un público muy fiel.

-Viene de agotar las entradas para sus conciertos en Madrid y Barcelona. Ahora le queda la parte andaluza de la gira...

-Estamos llenando en casi todos los conciertos, pero ahora llega la reválida en mi tierra.

-Para la carátula de 'Campamento Labandón' deja las camisetas y los vaqueros y aparece con chaqueta y camisa. ¿Madurez?

-Fue una idea de la directora del videoclip pero yo me dejé, pero seguramente hace cuatro años no lo hubiese hecho. Quizás quería expresar que este disco es más serio, con un mensaje positivo pero pasional.

-Repasando su carrera como El Arrebato parece que hay dos etapas, una con 'Poquito a poco', 'Una noche con arte' y 'Que salga el sol por donde quiera', y una seguda etapa que integra sus tres últimos discos.

-Claro, la primera es una etapa de conquista, eres un poco más agresivo a la hora de intentar llegar a la gente. En la segunda etapa de la que habla ya empiezo a producir todos los temas y tomo las riendas, intento buscar mis referentes en la música, cosas que le gusten a la gente y que me llenen. Creo que he conseguido que cada disco sea más autobiográfico y más verdad.