POR escrito. La concejal de Tráfico ha querido que el mensaje llegue a cada uno de los taxistas y ha remitido una dura carta en la que pide que cumplan con su obligación de servicio público y no desasistan uno de los barrios más visitados de la ciudad. La carta llega precedida de las quejas de los hosteleros y algunos turistas que denuncian el rechazo de algunos integrantes de la gremial a realizar el servicio en el barrio. El problema es que las quejas también han llegado antes por parte de los vecinos y la respuesta del Ayuntamiento no ha sido ni tan rápida ni tan contundente. El conflicto que se abrió con la peatonalización de la Carrera del Darro sigue abierto y es una herida que no deja de generar malestar ni titulares. El gremio del taxi asegura que hace lo que puede y que acude a la zona pero se guarda un as en la manga... No todos los taxistas pueden circular por la zona -algunos por razones puramente físicas- y otros exponiendo todo tipo de excusas. ¿También los taxistas abandonan el Albaicín? Confiemos en que no.

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