Con la cercanía de la celebración de las elecciones municipales en mayo, más de un político se ha cargado las pilas y encuentra 'enemigos' allá por donde vaya. Es curioso acudir a actos públicos en los que están representados las diversas instituciones, y por ende los distintos colores políticos, y ver como se revuelven los que tiene cargo por pescar un micrófono y soltar su mitin alabando las grandezas del trabajo realizado en estos años. Claro que siempre está el oponente listo que saca pecho por los logros que generó el rival y él vende o inaugura. Más codazos y reversos que en una pista de baloncesto.