El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha mostrado su preocupación, en una entrevista concedida al Grupo Joly que se publica hoy, sobre la pérdida de competitividad que está sufriendo Andalucía frente a sus vecinos Marruecos y Portugal, países hacia donde se están desviando muchas inversiones internacionales que podrían haber recalado en Andalucía, con la consiguiente pérdida de riqueza y empleo para nuestra tierra. Los datos no mienten y el propio presidente Moreno los resalta: Marruecos -uno de los pocos países musulmanes con estabilidad política- está creciendo al 6%, con el desarrollo espectacular de Rabat y Tánger. A los andaluces nos debería preocupar especialmente este último, pues a nadie se le escapa la potencia que está adquiriendo la antigua ciudad internacional, cuyo puerto es ya un serio competidor para los puertos andaluces. Aparte están los cada vez más desarrollados sectores turístico y agropecuario. Por su parte, Portugal ya es un ejemplo de cómo salir de una profunda crisis combinando una política económica responsable con las obligaciones sociales del Estado. Su tasa de paro del 7% contrasta fuertemente con la andaluza, que alcanza el 22%. En palabras de Juanma Moreno, Andalucía se tendrá que "poner las pilas" si no quiere peder aún más competitividad ante unos vecinos que están al alza.

Es evidente que, como señala, Juanma Moreno la disminución fiscal y la simplificación burocrática contribuirán para mejorar nuestro atractivo económico. El llamado Gobierno del cambio tiene, pues, tarea por delante para esta legislatura. Pero debe hacerlo con responsabilidad, consciente de las muchas obligaciones sociales que tiene la Junta y sin que los cambios en las normativas generen más problemas que los que resuelven. La tarea es ingente, pero justificaría la confianza que han puesto los ciudadanos en los partidos que apoyan al Ejecutivo de Juanma Moreno.