En Cruz Roja Española mantenemos un fuerte compromiso con las personas y con el medio ambiente. Hacer frente al cambio climático será la principal prioridad de todo el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en la próxima década. Por eso, orientar nuestra intervención desde una perspectiva sostenible, y más aún en estos momentos tan delicados, adquiere una gran importancia.
La pandemia del coronavirus nos ha puesto a prueba en muchos aspectos. Todas las instituciones, entidades y administraciones hemos tenido que reformular nuestra forma de trabajar, nuestra respuesta y sobre todo, nuestro foco de atención. Al mismo tiempo que ha impactado con dureza en nuestra sociedad a niveles sanitario y social, nos ha unido aún más. Hemos tenido que trabajar más coordinados que nunca con el objetivo de dar la mejor de nuestras respuestas.
Se cumplen ahora doce meses desde que pusimos en marcha el plan Cruz Roja Responde, y es que sabíamos, gracias a nuestra experiencia en situaciones anteriores similares, que necesitaríamos tener la capacidad de atender a nuevas personas que se iban a ver envueltas en situaciones de vulnerabilidad. Un plan que a día de hoy ha atendido a más de 3 500 000 personas en todo el país, de las cuales, más de 51 000 son de Granada.
La crisis derivada de la pandemia del coronavirus se caracteriza por ser, a diferencia de otras, de carácter horizontal. Esto quiere decir que no discrimina por población, geografía o sector. De una manera más o menos intensa, todas las personas nos hemos visto afectadas por la crisis, y por eso, el plan Cruz Roja Responde cuenta con diferentes áreas de actuación, para no dejar a nadie atrás.
La infancia, por ejemplo, es uno de los colectivos que está viviendo esta situación de manera más especial. Hemos volcado todos nuestros esfuerzos para que la intervención que veníamos realizando con cientos de niños y niñas de Granada pudiera mantenerse, aunque fuera reformulando las formas y los canales.
La cooperación con empresas como Emasagra es fundamental para desarrollar con plenas garantías nuestra labor. Nos une algo tan importante como es el compromiso social por una sociedad más justa, y esto se traduce en iniciativas conjuntas que benefician a cientos de granadinos y granadinas. La escuela de verano para infancia vulnerable o el acceso de nuestros participantes a bonos sociales en suministros son un buen ejemplo de esta alianza, suscrita entre Emasagra y nuestra organización en un convenio para apoyar el Plan Cruz Roja Responde.
Desde Cruz Roja hemos reforzado y ampliado los servicios que veníamos ofreciendo con anterioridad, y es que la demanda se ha multiplicado a raíz de la pandemia, las restricciones de movilidad y la situación de desempleo.
En una fase inicial, centramos todos nuestros esfuerzos en garantizar la cobertura de las necesidades básicas de las personas, haciendo entrega de alimentación y productos de higiene a familias que se encuentran en una situación vulnerable. Para ello, mantenemos una gran coordinación con el resto de entidades y agentes sociales. En total, desde el mes de marzo de 2020, hemos hecho entrega de este tipo de ayudas a más de 30.000 personas de toda la provincia.
En el momento en que estas necesidades están cubiertas, estamos en disposición de poder trabajar con esas personas y familias desde una perspectiva más global, analizando sus casos concretos y estableciendo planes personalizados de intervención, en los que incluimos otras acciones que varían en función del perfil y las necesidades.
En este punto entraría algo tan importante como el acompañamiento y la orientación laboral, imprescindibles a día de hoy para mejorar las capacidades de acceso al mercado laboral mediante la formación, o el acompañamiento educativo para los niños y niñas de estas familias.
“La pandemia ha impactado con dureza en nuestra sociedad, pero nos ha unido aún más”
El medio ambiente supone para nosotros un eje vertebrador de nuestra intervención. Por eso, es una parte fundamental del Plan Cruz Roja Responde. Compensar nuestra huella de carbono o reducir los niveles de pobreza energética -el 50% de las personas a las que atendemos debe decidir entre alimentarse correctamente y calentar su hogar- son solo algunos ejemplos de nuestro compromiso. Además, al margen de todas estas personas a las que hemos atendido desde el Plan Cruz Roja Responde, hemos continuado cerca de todas aquellas con las que ya veníamos trabajando, estableciendo como esenciales todos nuestros servicios dirigidos a personas sin hogar, mujeres en situación de vulnerabilidad, personas inmigrantes, afectados por VIH sida o jóvenes extutelados.
Las alianzas son nuestra forma natural de trabajar, buscamos sinergias y construimos conjuntamente con empresas, organizaciones, administración y la sociedad en general para maximizar nuestro impacto real en la sociedad y generar verdaderos cambios sistémicos. No puedo dejar de agradecer a todas las personas que están haciendo posible todo este trabajo. Una situación excepcional requería una respuesta sin precedentes, y así fue: el Plan Cruz Roja Responde frente al Covid-19, lanzado ahora hace un año, es la mayor operación de la historia de Cruz Roja Española en cuanto a la movilización de recursos, capacidades y personas.
