Abandonan tres concejales de Salobreña cuando dejan de cobrar

Era un secreto a voces. La falta de sintonía del propio alcalde de la Villa, Gonzalo Fernández Pulido, con sus mismos concejales había trascendido incluso a los plenos, donde se mostraba su desacuerdo. Así, María José García (concejal de Igualdad, Servicios Sociales y Comercio), Irene Justo (responsable de Turismo y La Caleta) y Javier Ortega (Mantenimiento y Obras, Deportes y Cementerios) renunciaron ayer a sus competencias municipales, pero seguirán -según apuntan fuentes cercanas al Ejecutivo local- con sus actas.

A partir de aquí, se abre un abanico de posibilidades. En el caso de que, finalmente, María José García e Irene Justo no quisieran tampoco seguir como concejales del PSOE, la siguiente de la lista es Rosa Benavides, que ha expresado sus desavenencias con el alcalde. En cuanto al concejal no adscrito, si abandonara, entraría Manuel Pérez Cobos, que también está encontrado con él. En este caso, incluso podría perder la alcaldía, ya que se quedaría sin mayoría.

Muy distinta es la explicación que da el alcalde a esta situación. Fernández Pulido emitió ayer un comunicado en el que dice que "el Ayuntamiento, en cumplimiento de la Ley de Administración Local impulsada por el PP, ha debido eliminar la dedicación exclusiva de tres concejales, lo que les impedirá ejercer sus funciones debido a la incompatibilidad con sus profesiones". Y continúa: "María José García, Irene Justo y Javier Ortega aceptan esta medida". En el mismo escrito, el arremetió contra esta ley, a su juicio: "Una invasión por parte del Estado en las competencias municipales y un ataque a la autonomía local".

El escenario se queda de la siguiente manera: 5 de los 9 concejales del equipo de gobierno mantienen la dedicación exclusiva, conservando sus sueldos: el alcalde, la primera teniente de alcalde, Mari Carmen Rodríguez Callejón, y el segundo teniente de alcalde, Ricardo Ruiz, además de María Eugenia Rufino y Manuel Guirado. Martín Valenzuela se mantiene como responsable del área de Medio Ambiente, aunque como concejal no liberado, situación que mantiene desde que se inició su mandato. Los departamentos de los concejales que han renunciado se distribuirán entre los que mantienen sus competencias.