El Ayuntamiento declara la guerra a las previsibles plagas de cucarachas

El Ayuntamiento de Salobreña ha puesto en marcha por tercer año consecutivo un plan de choque para el control y prevención de plagas, que incluye tratamientos contra cucarachas y ratas. La intención es prevenir las invasiones de estos animales que se producen cada temporada con la llegada del calor, y que este año podrían ser más pronunciadas debido a las lluvias del invierno.

Los trabajos, encargados a la empresa Sanisur, comenzaron el pasado jueves en las zonas más afectadas en temporadas pasadas, y se prolongarán durante todo mayo. Las labores de desinfección, desratización y desinsectación se centran en toda la red de alcantarillado de Salobreña y sus anejos, y son ejecutadas por una docena de trabajadores, que cuentan con cinco vehículos y aparatos termonebulizadores.

El concejal de Medio Ambiente, Gustavo Aybar, explicó que la intención es "adelantarse en el tiempo por la llegada del calor", y destacó que este año se han aumentado los recursos, tanto personales como mecánicos. Las plagas de cucarachas y ratas "pueden ser especialmente importantes este año debido a las lluvias", indicó Aybar, y añadió que "tenemos una de las campañas de control integrado más completas de la provincia".

El proceso de desinsectación se realiza a través de chorros de humo de aceite termonebulizable mezclado con un insecticida de piretrina natural, que es inyectado en todas las alcantarillas del municipio. Según explicó José Francisco del Carpio, director técnico de Sanisur, es un sistema "de última generación, más ecológico y eficaz".

El procedimiento se realiza en tres fases. En la primera se diagnostica la situación; en la segunda se aplica el tratamiento de prevención; y en la tercera se revisan los puntos que han sido conflictivos en otros años. En estos trabajos se emplean unos 300 kilos de ceboraticidas y 150 litros de insecticida de última generación, que reducen el riesgo de posibles contaminaciones al medio ambiente.