Chamaquito de Granada, la alternativa del orgullo y la promesa
El granadino dedicará su actuación de esta tarde a su padre fallecido
El próximo martes 12 de octubre, día de la Hispanidad, tomará la alternativa en Atarfe Antonio Hernández 'Chamaquito de Granada', y tendremos así los granadinos un nuevo torero, porque aunque su cuna fue hace 33 años en Granollers, reconoce que es "un granadino nacido en Barcelona". Otro alternativado que esperemos no engrose las listas del paro taurino, aunque tal y como han rodado las cosas para este chaval, y en las circunstancias en las que la toma, no parece nada fácil abrirse camino en el angosto mundo de la tauromaquia.
Los 14 años que lleva Chamaquito luchando por ser torero no han sido un camino de rosas, tanto en lo personal como en lo profesional, lo que le ha llevado a perder un poco la fe, pero ha llegado el día de la verdad y el granadino de adopción verá así cumplida la promesa que le hizo a su padre en el lecho de muerte, ser torero, y serlo en Atarfe. Aunque lo prometido a su padre haya sido el motor impulsor de esta decisión, no ha sido lo único que lo ha llevado a tomarla, al asegurar que "puede que si no se lo hubiera prometido a mi padre no la hubiera tomado, aunque no es menos cierto que, tal vez por amor propio, habría llegado hasta el final de todas maneras".
De lo que está seguro Antonio es de la decisión que hubiera tomado su progenitor si estuviera a su lado "nunca me habría dejado tomar la alternativa en estos momentos" aseveró. Y es que, el aún novillero no se encuentra en una de las mejores etapas de su vida en lo profesional "No estoy en buen momento y sé que me costará mucho trabajo, es una pena que sea así un día tan importante" asegura. Pero es que, además, hay algo que no lo deja vivir en el sosiego que un profesional debe tener para preparar un momento tan importante "lo que más miedo me da es bloquearme y no estar a la altura de lo que la gente que aún confía en mí espera de ese día, porque el oficio se aprende toreando, y pese a que llevo 14 años en el oficio, he toreado muy poco" aseguraba.
Chamaquito de Granada está haciendo un esfuerzo titánico por conseguir su ilusión, y ha tenido que dejar hasta su propio trabajo, aunque reconoce que "hay que ser iluso y tener dos pantalones para hacer lo del martes, ya que la corrida es exigente y necesita una preparación fuerte, y yo no la he podido tener, así es muy difícil". Eso no le quita un ápice de ilusión al granadino de poder hacer algo grande, pese a que es consciente de no saber lo que va a pasar, y esa responsabilidad le preocupa y angustia.
Llegó a Atarfe por una promesa y compromiso del empresario Pedro Pérez 'Chicote', pese a ser consciente de que las fechas no son las más adecuadas, las circunstancias económicas tampoco, y el cartel no es de los llamados de 'tirón', pero el compromiso de darle la alternativa a Chamaquito en el pueblo en que vive actualmente y está empadronado, era casi ineludible. Otra cosa es cómo van a sacar adelante el 'marrón' económico que tiene un festejo de este tipo, no olvidemos que el ganado es de Santiago Domecq, que no es precisamente de las baratijas del mercado. Pero para el próximo matador de toros es una magnífica oportunidad para acudir al tendido "lo que espero es que vaya la gente, ya que es un buen momento para demostrar que los modestos también podemos estar ahí y llenar plazas".
El padrino de ceremonia anunciado para esta tarde a las 17.30 horas es Antonio Barrera y el testigo el también granadino Jesús Fernández 'Yiyo', que merecen el máximo respeto para Chamaquito, aunque reconoce su debilidad por Julio Aparicio y Javier Conde, su cartel soñado. En la cuadrilla estarán Juan José Rueda 'El Ruso', David Moreno 'Alcazabeño' y Antonio Olivencia, junto a Gustavo Martos y Expósito como picadores.
Para ese día tan importante, Chamaquito de Granada, vestirá un traje fucsia y oro con remates de seda en negro, que era el preferido de 'El Accitano', su padre, al que brindará el toro de la alternativa. Tampoco quiso olvidar a Rosa, su sufrida y asustada madre, a la que reconoce que ha engañado al decirle que la corrida era muy chica y que sería la última -cosa que no está en la mente del aspirante-; ni a su novia Beatriz, sin la que reconoce no habría podido dar un paso en esto.
Sólo desearle la mejor de las suertes y pedir el apoyo de la afición granadina para que, como aquella Feria del Corpus 2006, salga a hombros por méritos propios y se sienta engrandecido por los toros y sus paisanos, aunque el propio Chamaquito quiere dejar claro que "no quiero que nadie tenga conmigo un trato de favor, ni me regale una oreja si no la merezco", y eso lo engrandece.
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