Fallece en Toledo el obispo emérito de la diócesis de Guadix

A última hora del sábado falleció monseñor Juan García-Santacruz, obispo emérito de la Diócesis de Guadix. García-Santacruz estaba ingresado en el Hospital de las Tres Culturas de Toledo desde el pasado 24 de febrero una afección cardiorrespiratoria, por la que tuvo que permanecer en la UVI varios días. Aunque fue llevado a planta el pasado jueves 3 de marzo, su estado de salud era muy frágil y una notable insuficiencia cardíaca hacía pensar en lo peor, como así ha sido finalmente.

Juan García-Santacruz recibirá sepultura en Guadix, en la Catedral accitana, donde se ha preparado todo para acoger su cadáver. También en la Catedral se celebrarán las exequias a las cinco de la tarde de hoy lunes.

García-Santacruz era obispo emérito de Guadix hacía poco más de un año, desde que el 27 de febrero de 2010 fuese ordenado obispo accitano el actual prelado, Ginés García. Desde aquel día, pasó a ser obispo emérito de la diócesis de Guadix y marchó a Toledo, donde ha residido en compañía de su familia. Tenía 78 años y ha permanecido en la diócesis accitana algo más de 17 años como obispo titular.

La Catedral de Guadix será el destino definitivo del cuerpo del obispo emérito de la diócesis accitana. El funeral de exequias será hoy, a las 17:00 horas, en una celebración que estará presidida por el obispo accitano, Ginés García, y que será concelebrada por algunos obispos y por los sacerdotes de la diócesis. Después, sus restos serán llevados a la capilla del Cristo de Burgos, donde ya está todo preparado para acoger el féretro.

Además, desde ayer por la tarde, desde la llegada del féretro desde Toledo, está siendo velado por los accitanos en el Salón Azul del Obispado de Guadix. La capilla ardiente estuvo abierta a todos los que quisieron asistir para despedir al que ha sido pastor de la diócesis durante más de 17 años, hasta que se cerró a la medianoche. Hoy se volverá a abrir la capilla ardiente a las 7:00 horas y estará abierta hasta el funeral, que será a las 17:00 horas.

Se espera que sean muchos los fieles de la diócesis que acudan a despedir al que ha sido un obispo cercano y muy querido. Los sacerdotes de la diócesis han establecido ya turnos de vela distribuidos por arciprestazgos.

Antes de que el cuerpo de García-Santacruz reciba sepultura en la capilla del Cristo de Burgos, el cabildo, el consejo episcopal y los arciprestes se dirigirán hasta la capilla ardiente para acompañar el féretro en su camino hacia la catedral. Allí será recibido con las oraciones correspondientes y, una vez situado el féretro frente al altar, se le colocarán su mitra, su báculo y un Evangeliario, como signos distintivos de su ministerio episcopal. Después se leerá una breve semblanza de su persona y de su trabajo pastoral como obispo de Guadix para, posteriormente, celebrar la Eucaristía.

Al terminar la celebración, será el mismo cabildo y el obispo de Guadix quienes acompañarán al féretro hasta la capilla donde será enterrado. Que sea inhumado dentro de la catedral responde a una tradición por la que los obispos se suelen enterrar en las catedrales donde han terminado su ministerio episcopal. Y García-Santacruz era obispo de Guadix, aunque emérito.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Guadix llamentó ayer el fallecimiento de García-Santacruz. Así, las banderas de la Casa Consistorial ondearán a media asta durante tres días y desde el Ayuntamiento se invitó ayer a los ciudadanos a darle el último adiós al obispo emérito tanto en la capilla ardiente como en el funeral.

De hecho, el Ayuntamiento de Guadix, con su alcalde a la cabeza, Santiago Pérez López, y el resto de la Corporación Municipal, lamentaron la pérdida del obispo emérito, que también era hijo adoptivo de Guadix .

A la localidad granadina llegó el cuerpo ayer por la tarde procedente de Toledo, donde centenares de personas despidieron en el funeral celebrado en la iglesia de Santiago del Arrabal en Toledo a Juan García-Santacruz Ortiz.

La misa fue oficiada por el arzobispo de Toledo y primado de España, Braulio Rodríguez Plaza, y a ella asistieron, entre otros, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page; el vicealcalde y concejal de Cultura de Toledo, Ángel Felpeto; y el alcalde de Navahermosa (Toledo) -localidad en la que nació Juan García-Santacruz-, Carlos-Emilio Pérez.

Braulio Rodríguez Plaza expresó la "tristeza y el dolor" con la que la iglesia de Toledo quiso unirse a los hermanos y la familia de Juan García-Santacruz y al actual obispo de Guadix, Ginés García, por la "pérdida" del obispo emérito.

Así, indicó que la Archidiócesis de Toledo no es "en absoluto ajena a este dolor porque don Juan también es hijo de esta iglesia y aquí como miembro del presbiterio ha vivido largos años", por lo que, dijo, "oramos y ofrecemos la eucaristía en este domingo primero de la Cuaresma".

Tras recordar los comienzos de Juan García-Santacruz en el año 1956 como presbítero y repasar su trayectoria, Rodríguez Plaza destacó la "jornada inolvidable" que el obispo emérito de Guadix vivió cuando era párroco de la iglesia de San José Obrero en el barrio toledano Santa María de Benquerencia, con la visita el 4 de noviembre de 1982 del Papa Juan Pablo II Toledo, donde, señaló "vivió con alegría" la celebración "multitudinaria" con motivo del primer viaje papal a España.