La Audiencia de Granada llevará a cabo el juicio en abril al individuo acusado de matar a su padre mediante numerosos golpes en la cabeza con un pico de construcción. La defensa solicita su ingreso en un centro psiquiátrico, ya que cometió el crimen durante un episodio de esquizofrenia, enfermedad previamente diagnosticada.

Un jurado popular será el encargado de evaluar este caso en una única jornada de audiencia para revisar los acontecimientos, ocurridos el 30 de marzo de 2022.

Ese día por la mañana, la víctima, de 76 años, se trasladó hasta la casa del procesado en Albolote (Granada) para acompañarle a una cita en salud mental.

Ya en el garaje comenzó una discusión en la que el procesado le quitó las gafas a su padre y empezó a golpearle pese a la petición de parar de la víctima.

La Fiscalía ha explicado que el procesado actuó sin dejar posibilidad de defensa a su padre, septuagenario y con escasa visión sin sus gafas, y que lo hizo además con la clara intención de acabar con su víctima.

En ese ataque, el acusado utilizó un pico de obra de unos 50 centímetros de longitud con el que golpeó reiteradamente a su padre en la cabeza y el tórax, ocasionándole múltiples fracturas en el frontal y la base del cráneo que eran incompatibles con la vida.

"Para aumentar el dolor y la agonía" de su padre, según la Fiscalía, el procesado se subió sobre su tórax para generar un aplastamiento que le rompió todos los arcos costales. Acto seguido, arrastró el cuerpo de su padre aún con vida hasta la calle, cerró el garaje y lo dejó en mitad de la calzada.

Aunque el septuagenario fue atendido en un centro hospitalario, murió pocas horas después del ataque por los golpes producidos por su hijo.

El procesado, con un diagnóstico de esquizofrenia paranoide de evolución continua, sufrió en el momento de los hechos una descompensación que lo privó de sus capacidades volitivas e intelectivas.

La Fiscalía ha calificado los hechos como un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento y el agravante de parentesco, y atendiendo a las capacidades del procesado, ha solicitado su internamiento en un centro psiquiátrico durante 25 años y otros 10 de libertad vigilada.

Aunque la víctima tuvo tres hijos, era viudo y el único que le sobrevivió fue el procesado, aunque sí deja cuatro nietos.

Un jurado popular se encargará de esta causa en una vista fijada para el 8 de abril en la Sección Primera de la Audiencia de Granada .