Tres toros de lidia han resultado muertos este sábado en un encierro celebrado en la localidad granadina de Cortes y Graena, en el norte de la provincia de Granada, después de escaparse del recorrido que realizaban y poner en peligro a los asistentes y a los ganaderos, que trataron de reconducirlos.

Fueron los agentes de la Guardia Civil los que, temiendo por la integridad de los asistentes y ante la peligrosidad del suceso, abrieron fuego contra los animales, unos novillos de tres años, matándolos para así evitar que estos atacaran a la multitud.

Los hechos ocurrieron cuando, durante el transcurso de la carrera, uno de los astados perseguía a un corredor. Este, al dar una curva, ha intentado subirse a una valla para evitar una cornada. Es ahí cuando el utrero ha impactado contra la valla con fuerza, abriéndola y así escapando del recorrido del encierro. Pocos segundos después han salido los otros dos novillos, tras ver el escape producido por el primero, saliendo por la parte norte de la localidad.

Imagen de uno de los toros tras ser abatidos por la Guardia Civil

Esto pasaba en torno a las 14:30 horas de este sábado, según ha confirmado el Servicio de Emergencias 112 Andalucía a este periódico. Rápidamente, los ganaderos han cerrado la verja para evitar más escapes y han ido a tratar de redirigir a los toros, algo que no ha sido posible. 

La búsqueda de los animales se ha alargado unas dos horas, hasta que tanto ganaderos como agentes de seguridad han conseguido estrechar el cerco y encontrar a los utreros. Estos, en su huida, han llegado hasta la carretera entre la localidad de origen y la Peza, lugar en el que han sido abatidos dos de ellos.

Más difícil ha sido encontrar al tercero, quien se fue en dirección a la localidad de Purullena y huyó por el campo, y el cual tras dos horas de persecución ha sido muerto a tiros.

El último novillo ha sido localizado a cinco kilómetros de la localidad. Para poder sacrificarlo, ha tenido que ser acorralado con caballos y una cuerda. Sin embargo, en un momento se ha soltado y ha asestado una cornada a uno de quienes trataban de atraparlo. Este hombre ha sido trasladado primero al Hospital de Guadix, y posteriormente hasta un centro hospitalario de Granada.

La localidad ha vivido con cierto pánico este escape, en el que los toros han arremetido contra los ganaderos y contra los vehículos que se encontraban a su paso. Por suerte parece que todo se ha quedado en un susto, aunque el Consistorio se ha visto obligado a suspender la corrida de este sábado a las 18:30 horas por falta de novillos.