La posible solución para la movilidad dentro de la urbanización de Sierra Nevada mediante la construcción de un funicular soterrado en Pradollano tiene su origen en una iniciativa privada, según ha aclarado la consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Marifrán Carazo. Según la responsable de la Junta, esta administración pública tiene ahora que estudiar su viabilidad, aunque por el momento ya ha optado por incluir la idea en el Plan de Transporte Metropolitano del Área de Granada. 

En declaraciones a los medios de comunicación, preguntada por la información avanzada por este periódico sobre la inclusión del funicular en los planes de la Junta, la consejera matizó que el proyecto es privado, lo que supone que se haría de forma distinta a la del resto de remontes que se construyen en Sierra Nevada, construidos y gestionados por la empresa pública Cetursa. 

La idea del funicular subterráneo busca mejorar la movilidad en la zona de la urbanización de Sierra Nevada y en el propio Plan la Junta, que ya está en fase de información pública, admite que la opción "que se adaptará mejor a la problemática sería un funicular subterráneo siguiendo el trazado del actual telesilla urbano, y extendiéndolo hasta el Telesilla Virgen de Las Nieves en la parte alta".

Y expone como razones, de un lado, que "el funicular permite un trazado mixto recta-curva, consiguiendo llegar hasta la parada inferior del TS Virgen de Las Nieves, aspecto que con otros medios no se podría conseguir". Además, alude a que un trazado subterráneo "elimina los problemas de ruido, la afección visual, y las posibles incidencias meteorológicas". También destaca como ventajas una "larga vida útil" y "se estima que con un correcto mantenimiento puede tener rendimientos óptimos hasta los 100 años, casi tres veces más que in medio de transporte por cable aéreo" como el actual telesilla, que además califica como un medio de transporte "obsoleto, lento y con poca capacidad (2 personas por silla y 700 por hora)" donde "se forman grandes colas de espera en horas punta, creando insatisfacción entre los visitantes".

El recorrido subterráneo viene marcado asimismo porque "la urbanización es compacta" y no tiene "espacio para trazar nuevas líneas de remontes", y que además está rodeada por los Parques Nacional y Natural de Sierra Nevada por sus cuatro puntos cardinales, lo cual "dificulta la creación de otras infraestructuras". Otro motivo que juega a favor este remonte ferroviario sería que "solo necesitaría personal en la sala de mandos, pudiendo adaptar la frecuencia y capacidad, y funcionar hasta las 24 horas del día", sería accesible a personas con discapacidad y se recuperaría el terreno que sobrevuela el telesilla Parador I para otros usos.