Investigan el recorrido del menor que murió atropellado en Huétor Tájar para esclarecer el accidente

La investigación abierta por la Guardia Civil sobe el atropello del domingo pasado de un menor de 11 años cuando caminaba solo por la A-92 a su paso por Huétor Tájar se centra ahora en determinar el recorrido que hizo el niño desde que salió de su casa hasta que se produjo el accidente, según han indicado desde la Guardia Civil, que trata de esclarecer las circunstancias en las que se produjo el accidente de tráfico,.

El suceso ocurrió pasadas las 6:40 horas de este domingo en el kilómetro 201 de la A-92, en la salida hacia Huétor Tájar, cuyo alcalde, Fernando Delgado, explicó a Efe que el niño, originario de Bolivia, llegó al municipio hace alrededor de un año para vivir con sus dos hermanos y con su madre, que llevaba más tiempo en la localidad. Tras el accidente, la mujer le trasladó que el menor salía a hacer ejercicio para bajar de peso.

De forma paralela, aunque sin relación con la investigación sobre el atropello, la Guardia Civil investiga si el menor sufría acoso escolar a raíz de lo trasladado por su familia, según ha informado a Efe el instituto armado.

Esa posibilidad se investigará, añaden las fuentes, como se hace en todos los casos en los que se tiene conocimiento de un posible acoso en las aulas, pero de manera independiente a las diligencias abiertas tras la muerte del menor, que se produjo, según la principal hipótesis que maneja en este momento la Guardia Civil, por un accidente.

La madre del menor ha señalado, en declaraciones a Canal Sur TV, que su hijo quería bajar de peso, de ahí que saliera por las mañanas a hacer ejercicio, y ha dicho que sufría acoso por su aspecto físico y su origen boliviano. Fuentes de la Junta de Andalucía han trasladado por su parte que no constaba denuncia por acoso, por lo que no se había abierto el protocolo habitual en estos casos.

La consejera de Educación, Carmen Castillo, se ha referido a preguntas de los periodistas a este asunto para señalar que esperarán el resultado de la investigación de las fuerzas de seguridad para, a partir de ahí, adoptar las medidas pertinentes.

Castillo ha manifestado que los centros educativos son "centros seguros donde los niños y niñas están protegidos" porque los profesores, dice, están pendientes de ellos. "La cosa es que no podemos saber las reacciones de cada niño, pero sí es verdad que se toman todas las medidas que son necesarias para afrontar las dificultades", ha señalado. La consejera ha apuntado que en un sistema con 1,8 millones de alumnos y más de 7.000 centros, "todos los días hay incidencias", pero "los centros educativos son seguros, se adoptan las medidas que son necesarias y estamos trabajando siempre para mejorar la convivencia escolar", ha concluido.