La Semana Santa Viviente, una verdadera joya de la provincia

Cada rincón en España se funde en el llanto, pena y dolor del sacrificio de Cristo durante la Semana Santa. Cuevas del Campo no es diferente. Durante unos días, este pueblo, se convierte en la Jerusalén de hace más de dos mil años para recrear la drama de la Pasión de Cristo.

El Viernes Santo tiene lugar el acto central, una silenciosa representación, pues apenas se enumeran treinta frases en sus dos horas y media de duración.

Bajo la dirección de Antonio Martínez, su espléndida y riquísima escenografía, enriquecida con un vestuario bellísimo, una banda sonora impresionante y los escenarios naturales que dejan el publico emocionado, expectante y atónito todos los años. "Esto no es tanto un evento religioso, es mucho más cultural. Junta desde niños a personas mayores. Hay familias enteras juntas en esto, se crea una magia increíble.", dice Martínez.

La Semana Santa Viviente se celebra desde hace 9 años y se ha convertido en una de las fiestas más emblemáticas de la provincia de Granada.

Esta dramatización se inicia con la presentación ante Pilatos de Jesús y finaliza con la escena de la Resurrección.

En vivo participan alrededor de 650 actores en que cada uno tiene su papel, recrean los oficios de la época, así como actividades gastronómicas, de tal forma que el pueblo entero se convierte en un gran escenario. Toda la comunidad se reúne con intenso fervor y sincera humildad en este calvario parecido con Cristo.