La Victoria estrena palio tras diez años de trabajo

La Cofradía de Nazarenos Nuestro Padre Jesús del Perdón, María Santísima de la Misericordia, Nuestra Señora del Carmen y San Juan Evangelista inició su estación de penitencia en la noche del Martes Santo desde la iglesia de la Encarnación, donde el público pudo contemplar previamente los paseos montados.

Este año, además, había más motivo de admiración, pues estrenaba el palio de la Virgen, bordado en realce por Elena Burgos, en Motril, finalizando así un proceso que ha durado diez años. Estaba a falta de las caídas laterales y ayer salió por primera vez bordado por dentro y por fuera, con lo cual -según los hermanos- "por la calidad que tiene es digno de cualquier capital". Otro estreno eran los faldones a juego con el color del terciopelo del palio, que antes era más oscuro. También era nuevo el encaje de Bruselas del rostrillo de la Virgen que, con el pañuelo, ha sido donado por un hermano.

El exorno floral del paso de la Virgen ha corrido a cargo de Álvaro Abril, manteniendo la misma línea que otros años.

Entre las novedades se podía apreciar en la candelería de María Santísima de la Misericordia (que continúa un gran proyecto iniciado el año pasado) una segunda fila elaborada en los talleres sevillanos de Orfebrería Andaluza, de Manuel de los Ríos. También la Cruz parroquial y los ciriales que abrían el tramo de sesión de la Virgen y dos incensarios, que completaban el juego. La talla del paso del Señor del Perdón, además, estrenó la trasera de los respiraderos tallada en Córdoba por José María Higuera, ya en su fase final del paso, a falta tan sólo de los laterales, que el año que viene esperan que esté terminada o bastante avanzada. Este año se han cambiado las rosas rojas que llevaba en el friso por rosas moradas, y la forma del monte del Señor se ha variado, intentando darle un toque más real.