Indignación y planes alternativos por el cierre de Sierra Nevada: "Hemos perdido unos 5.000 euros por la huelga"

La primera jornada de huelga de los trabajadores de Cetursa en Sierra Nevada ha provocado el cierre de la estación de esquí en uno de los días más potentes de la temporada invernal. Sábado, en mitad del Puente de Andalucía, con miles de reservas realizadas, y los hoteles y apartamentos al 80%. Muchos de los esquiadores que hoy se dejaban ver por Pradollano mostraban su resignación ante una jornada perdida, mientras que profesores de esquí y comercios de la zona se sentían indignados ante la situación provocada por la falta de entendimiento entre los empleados de Cetursa y la empresa pública.

"Debido a la huelga convocada para hoy 1 de marzo por el comité de empresa de Cetursa Remontes, la estación de esquí y montaña de Sierra Nevada permanecerá cerrada durante toda la jornada", anunciaban los carteles informativos por toda la urbanización. Un anuncio que molestaba a los esquiadores que habían madrugado para subir al macizo granadino y no sabían nada de la huelga.

Manuel García, un esquiador venido desde Santiago de Compostela hasta Granada en busca de la nieve, aseguraba a primera hora de la mañana a Granada Hoy que no sabía nada de la huelga, y que se la ha encontrado nada más bajarse del coche. "Somos un grupo de cuatro amigos que hemos venido a esquiar, pero hoy no podrá ser. Ayer ya estuvimos esquiando, pero nadie nos informó de que había convocada una huelga ni nada, nos acabamos de enterar", decía con resignación ante el viaje para nada.

Aunque al menos ellos tienen más suerte que otros. "Como nos alojamos en Granada capital, ahora bajaremos, guardaremos los esquís, y nos buscaremos un plan alternativo en la ciudad. Y mañana lo volveremos a intentar". Ese era el plan de la mayoría, dejar la urbanización y buscar algo que hacer para pasar la jornada.

Manuel García compartía sus intenciones con Elisa Difolco, una italiana residente en Córdoba que aprovechaba la festividad del Puente de Andalucía para ir a la nieve por primera vez. Y, al igual que los gallegos, ya buscaba alternativas qué hacer para este sábado. "Es una lástima, porque venimos de lejos, era nuestra primera vez, y vamos a perder el día. Bajaremos a la ciudad a verla para pasar el día y mañana, ya sin huelga, seguiremos".

"No sabíamos nada, nos informaron anoche a última hora, y aun así hemos venido por si podíamos esquiar o si se solucionaba la huelga. Pero no ha habido suerte", ha asegurado a este periódico mientras sus amigos hacían cola para alquilar un trineo. "Hemos pasado de ser cinco adultos listos para esquiar a ser cinco adultos tirándonos con trineos por la pista", se reía. Un plan alternativo al que muchos turistas han recurrido hoy para quitarse el mono de nieve.

Pérdidas millonarias en los comercios

Mientras los turistas decidían que hacer, los comerciantes de Pradollano veían la situación desde el interior de sus locales con los brazos cruzados. Este sábado debería haber sido un día de muchísimo trabajo para todos ellos. De cafeterías llenas, de restaurantes con colas, de tiendas de alquileres trabajando a destajo, de aparcamientos completos... Pero la actividad del día se ha congelado con el cierre de la estación a consecuencia de las movilizaciones.

El dueño de la tienda de alquileres White World, Daniel Gaillefer, hablaba en inglés con una turista suiza sobre la situación. Esta le preguntaba si mañana habría huelga también, y sobre qué podía hacer hoy para pasar la jornada. Él le informaba de que esta situación sólo sería para hoy y le recomendaba hacer turismo activo por la zona de El Purche o Los Cahorros y algunos lugares para comer bien.

"Hemos tenido muchas cancelaciones hoy, es inevitable para un negocio como el nuestro si no se puede esquiar. Probablemente, hoy es el día más importante de toda la temporada de esquí, yo tengo a tres empleados hoy de brazos cruzados. Un comercio como el mío deja de ganar 5.000 euros hoy, multiplícalo por las 50 tiendas de alquiler que hay en Pradollano", se resignaba ante la pregunta de Granada Hoy. 250.000 euros perdidos sólo en material, a lo que hay que sumar pérdidas en restauración o en clases no impartidas. Y en la venta de forfaits, con un coste de unos 60 euros en temporada alta.

"La gente no entiende el porqué de la huelga, pregunta si mañana se va a esquiar o no. Hay poca información. Ni la empresa ni los trabajadores han velado por los intereses del resto de los negocios que compartimos espacio con ellos en Sierra Nevada. Con nosotros como parte interesada y afectada no se ha contado. Hemos pedido sentarnos con todos, y los trabajadores no han querido. Como empresarios no queríamos que se llegara a esta situación de tanto daño, queríamos ayudar a pactar una forma de huelga que no fuera tan perjudicial para todos", alegaba Gaillefer.

Una opinión similar tenía Carlos Olmedo, profesor de la Escuela Técnica de Esquí, que veía como hoy perdía todas las reservas de clientes a consecuencia de las movilizaciones de los trabajadores. "Estamos empeñados en cargarnos la gallina de los huevos de oro", decía con cierta indignación ante la pregunta de este periódico. Él tenía contratadas para hoy siete horas de clases, "y como yo 20 profesores más de mi escuela".

"Hoy todos los que trabajamos hemos perdido una millonada por una huelga que se podía haber salvado. Y no sólo se ha perdido dinero, el daño más grande no es hoy, es la imagen nefasta que dejamos a nivel nacional e internacional para el futuro. Hay mucha gente en toda España que se piensa que no hay nieve en Sierra Nevada, cuando aquí hay nieve de sobra para disfrutar. Y con cosas como estas, al final vamos a conseguir cargarnos la gallina de los huevos de oro", repetía.