La Guarda Civil de Jaén ha detenido en el municipio leonés de Ponferrada a uno de los considerados mayores y más activos acosadores sexuales en el país. La orden para su detención fue emitida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Úbeda, localidad de Jaén.

Operación Melos

La operación mediante la cual han tratado de dar con el paradero de este individuo recibe el nombre de Melos y se activó cuando una vecina de otro municipio jienense, concretamente de Jódar, denunció ante la Guardia Civil que entre los meses de agosto del año 2021 y febrero de 2022 alguien la había estado llamando a su teléfono móvil de forma insistente para acosarla a través de él.

Al parecer la mujer había recibido más de 100 llamadas en ese intervalo de tiempo, siempre desde un número de teléfono oculto, en las que un varón al que no conocía de nada le solicitaba favores sexuales. Pero esto no era lo único. La mujer también llegó a recibir mensajes a través de diferentes aplicaciones de tipo vejatorio y con un alto contenido sexual.

Al interponer la denuncia y abrir la investigación para dar con el autor del delito, los agentes comprobaron, analizando las llamadas, que el acosador disponía de tres aparatos móviles diferentes a los que iba cambiándole la tarjeta SIM. En total contaba con 20 números de teléfono diferentes, a nombres de identidades que o bien eran ficticias o bien había usurpado para dificultar su identificación.

Tras la investigación, los agentes han logrado localizar al presunto autor. Lo han hecho gracias a que han podido entrar en una vivienda y realizar un registro de la misma. Dicha casa se encontraba, concretamente, en Ponferrada y era propiedad del individuo, al que han acabado deteniendo.  

En total al acusado del acoso se le han intervenido nueve terminales de telefonía móvil, cuatro tablets, tres ordenadores de sobremesa, 25 tarjetas SIM de diferentes operadoras, 35 contratos fraudulentos con operadoras de telefonía a nombre de personas usurpadas y cuatro agendas en las que el detenido listaba todas las llamadas que realizaba a sus víctimas.

Tras la investigación se ha podido concluir que el detenido se ocultaba detrás de teléfonos a nombre de identidades que había robado, para posteriormente realizar llamadas indiscriminadas a números aleatorios y acosar sexualmente a las mujeres que respondían.

El detenido es un hombre de 76 años al que se le acusa de ser el autor de 38 delitos, 16 de ellos por acoso sexual telefónico, 11 de usurpación del estado civil, diez de falsedad documental y uno de amenazas, cometidos en diferentes puntos del territorio nacional.