Una rehabilitación en las entrañas y en la piel. La parroquia del Sagrario de la Catedral de Sevilla ha recuperado todo su esplendor tras una intervención en la que se han recalzado los cimientos y reforzado la estructura y se han atajado los problemas de ventilación de la cubierta y las infiltraciones de agua. Esta es la obra que no se ve pero que ha servido para devolverle la estabilidad a una construcción que arrastraba estos problemas prácticamente desde que se puso su primera piedra a mediados del siglo XVII. Pero además, el Cabildo aprobó una ampliación de los trabajos que ha posibilitado, entre otras actuaciones más lucidas, la restauración integral de las bóvedas y relieves escultóricos, la cúpula del crucero o las balaustradas y grupos escultóricos. Las obras, que han durado cuatro años y han estado marcadas por la incidencia del Covid-19 y su posterior crisis económica, han conllevado un importante esfuerzo económico por parte del Cabildo, que ha invertido más de tres millones de euros.

Los fieles que acudan desde este jueves a admirar la parroquia del Sagrario en las jornadas de puertas abiertas se van a encontrar con un edificio que no les recordará al que se cerró en 2019 para llevar a cabo las obras. La iglesia cuenta con una fabulosa luz tanto natural, gracias a la recuperación el aspecto original de la linterna, como artificial, debido a la completa y eficiente instalación diseñada por el arquitecto de la Catedral, Jaime Navarro Casas. Ahora, se pueden admirar con todo lujo de detalles las bóvedas y sus decoraciones que han recobrado el color blanco y los enlucidos en pan de oro que se ocultaron en la restauración que Menéndez Pidal llevo a cabo en los años 1964 y 1973. 

Aspecto del Sagrario tras su restauración.

El Cabildo ha presentado este miércoles los resultados de esta obra en un acto en el que el deán, Francisco José Ortiz Bernal; y el arquitecto que ha dirigido la obra, Eduardo Martínez Moya, han ofrecido todos los detalles técnicos e históricos. "Ha supuesto un gran esfuerzo por parte del Cabildo que ha hecho lo que debía y en una época muy complicada. Queríamos también enmarcar la apertura en el 775 aniversario de la recuperación del culto cristiano, ya que el Sagrario está dedicado a San Clemente", ha explicado el deán.

Otra perspectiva de la iglesia con la puerta que conecta con la Catedral al fondo.

El arquitecto ha desgranado en profundidad todas las intervenciones que se han llevado a cabo para que el Sagrario haya recuperado la estabilidad y luzca espléndido. "La iglesia siempre ha tenido siempre pequeñas fisuras y grietas. Mucho más en el interior, donde se tuvo que poner una red para proteger a los fieles de las caídas de caliches y cascotes. Gracias al plan de conservación preventiva de la Catedral redactado por Jaime Navarro se ha podido acometer estas obras que han le han devuelto todo su esplendor".

Vista general del templo.

La intervención se ha basado en los informes y estudios técnicos se hicieron entre los años 2015 y 2018. hasta 10 sesudos documentos analíticos (arqueología, geología, geotecnia, geotecnoarqueología, estructurales, de estado de trabajo, análisis históricos…, de seguimiento y fisurometría, etcétera) que revelaron que prácticamente desde que se puso la primera piedra en 1618 la estabilidad de la construcción ha estado seriamente amenazada. Estos estudios han sido fundamentales para redactar el proyecto e iniciar las obras con todas las garantías y una hoja de ruta clara en 2019. El contenido del proyecto era acometer una serie de actuaciones destinadas a resolver los problemas patológicos (de naturaleza estructural y de cimentación, así como constructivos) que seguían afectando sensiblemente al monumento. El contenido de estas obras adjudicadas a la empresa Proyectos y Restauraciones Kalam S.A. y que ha consistido en:

• Recalces de cimentación.
• Refuerzos estructurales.
• Reparación de los problemas de ventilación en las cubiertas.
• Reparación de los problemas de infiltraciones de agua por las cubiertas.
• Restauración de la fachada al Patio de los Naranjos.

Detalle de la limpieza.

"Para hacer el recalce se han realizado hasta 150 inyecciones de lechada de cemento bajo las pilas que han permitido cambiar el suelo, por así decirlo. Ha sido una labor delicada y concienzuda que duró medio año", ha explicado el arquitecto. Estas inyecciones en el subsuelo para reforzar los cimientos se han han hecho tanto en el perímetro exterior como en el interior del templo. Mediante una estación láser se han ido controlando todos los movimientos por milimétricos que fueran. Como ha añadido Martínez Moya, los trabajos de estabilización han sido parciales, porque no se han acometido (dada su gran repercusión), en las intervenciones que también son necesarias en el ámbito del contacto de la iglesia el Sagrario con la Catedral. Igualmente, tampoco se ha intervenido en la cubierta de la cúpula del Crucero.

En esta primera fase de los trabajos se detectó que en la intervención que José Menéndez Pidal llevó a cabo entre 1964 y 1973 había generado unas grandes tensiones en el edificio que se ha resuelto introduciendo unos grandes tensores en la cabecera. "Hemos apretado el Sagrario para que no se vuelva a abrir", ha subrayado el arquitecto.

Adiós al color gris, bienvenida la luz

La renovada parroquia del Sagrario llama ahora poderosamente la atención por la increíble luz y el color blanco de la piedra y su decoración. El arquitecto ha revelado que el color grisaceo se debía a una jabelga aplicada por Menéndez Pidal en 1973 para camuflar las grandes cantidades de cemento que empleó en la reparación. Los restauradores han eliminado esta piel oscura gracias a un trabajo muy minucioso que ha consistido en la reintegración de los elementos decorativos perdido en las bóvedas, principalmente en la del crucero, en la que han sacado a la luz el pan de oro que enmarcaba los casetones. La linterna que remata la cúpula formaba parte del proyecto original pero se descartó al detectarse los problemas de estabilidad en la estructura. Fue construida en 1973 por Menéndez Pidal aunque hasta ahora no se ha podido ver en su originalidad.

Así ha sido la restauración de la iglesia del Sagrario de Sevilla

La gran cantidad de hormigón empleada en esa última intervención y hasta cuatro capas impermeables colocadas en la cubierta impedían que el edificio pudiera respirar, además de generar un peso excesivo. Esta ha sido la segunda operación técnica realizada. Se ha dotado al edificio de una nueva sobrecubierta que permite ventilar el espacio interior. Para ello se han abierto unos puntos de ventilación atravesando las bóvedas históricas. Gracias al gran andamio instalado dentro de la iglesia para esta actuación se decidió afrontar la restauración de la piel que tan buen resultado ha dado.

Para ello, el Cabildo aprobó en febrero y septiembre de 2022 la ampliación del contenido de las obras. Se incluyeron las que han correspondido a los siguientes trabajos:

• Restauración de la totalidad del pavimento.

• Dotación de infraestructuras de interconexión con toda la Catedral.

• Restauración de las criptas.

• Renovación de ascensor y montacargas.

• Reordenación y recanalización de los flujos de agua históricos.

• Restauración de los paramentos.

• Restauración integral de las bóvedas y relieves escultóricos.

• Restauración integral de la cúpula del Crucero.

• Restauración de las balaustradas y los grupos escultóricos.

• Dotación de rampa móvil de acceso.

Trabajos en los retablos y esculturas

Un equipo de restauradores ha limpiado y repasado los retablos de las capillas laterales y las distintas esculturas que atesora el Cabildo. Para ello, se ha contado con un equipo de restauradores conformado por: María Barrera, Carmen Gallego, Fátima García y Pablo Tejero, que durante dos meses y medio han realizado las labores de limpieza superficial y tratamiento curativo en las capillas, retablos y rejas.

Tas realizar una revisión general de todas las piezas, se consideró imprescindible asegurar puntualmente aquellos elementos y estratos que se encontraban en peligro de desprendimiento. Igualmente, se ha realizado una protección de la madera, de carácter curativo y preventivo en aquellas zonas que lo requerían, se han subsanado y sustituido anclajes y elementos metálicos obsoletos, al mismo tiempo que otros elementos que no se encontraban cumpliendo función alguna.

Los trabajos de restauración.

Pero no sólo las tallas en madera han recobrado los brillos del pasado, las grandes esculturas de piedra de los evangelistas y padres de la Iglesia realizadas a mediados del siglo XVI por José de Arce lucen de manera espectacular.

Asimismo, en el majestuoso retablo mayor se ha realizado una limpieza superficial. Pendiente queda la restauración integral que ya cuenta con el visto bueno de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.

"La iglesia del Sagrario ha recobrado toda su majestuosidad gracias al gran esfuerzo del Cabildo. Podemos ver el esplendor de la piedra", ha resumido el deán.

El coste total de todas las obras ha sido de 3.033.680, 52 euros.

Procesión de la Espada y puertas abiertas

Por su vinculación a la figura de San Clemente y por conmemorarse este año el 775 de la reconquista de la ciudad y la recuperación del culto cristiano, el Cabildo ha querido que la reapertura sea protagonizada por la procesión de la Espada, que se celebra este jueves. De este modo, el cortejo entrará al Sagrario desde la Catedral por la llamada puerta de San Fernando y luego saldrá a la Avenida de la Constitución para seguir por las gradas altas antes de entrar por la Puerta de los Palos.

Los fieles que quieran podrán visitar el Sagrario hasta el próximo domingo y reencontrarse con su majestuosidad antes de que se coloque el mobiliario. Podrán hacerlo en el horario de cultos de la Catedral (8:00 a 11:00) a través de la puerta de San Fernando. O bien de 8:00 a 18:00 por la puerta de la Avenida de la Constitución.

El próximo viernes 1 de diciembre, se celebrará la eucaristía de acción de gracias y recuperación del culto que oficiará el arzobispo, monseñor José Ángel Saiz.