Crónica del jueves 28 de septiembre

Eduardo Casanova provoca una afrenta en 'MasterChef Celebrity' y debe pedir perdón a todo el mundo

El actor y cineasta Eduardo Casanova en un 'photocall'

El actor y cineasta Eduardo Casanova en un 'photocall' / RTVE

Toñi Moreno llora y rellora. Lo ha hecho siempre, pero en MasterChef Celebrity con más razón. Será de las que estén en la recta final del concurso ¿alguien lo duda? Pero en la gala de anoche hizo un desastre de brazo de gitano porque era de las que no podía usar maquinaria para la elaboración y cometió tantos errores que lo que presentó fueron unos trozos de bizcocho despegado con un engrudo dulce. "Voy a hacer una asociación con María del Monte, Fernando Tejero y Patricia Conde y voy a ser la presidenta". Toñi, con tal de ser presidenta es capaz de reunir a todo el victimario de Jordi Cruz. 

A Jesulín de Ubrique se le olvidó prepara la brunoise de manzana, con la fruta picadita de relleno. Y pese a tormar la alternativa en Francia es incapaz de pronunciar incluso la palabreja, claro.

En esta prueba de arranque Tania Llasera también elaboró un postre algo tosco pero de gran sabor y Álvaro Escassi lo hizo en tiempo récord con buen resultado. Y Miguel Diosdado pensaba que con su buena presentación se iba a salir y fue un desastre de sabor. El actor sevillano ya daba muestras de lo que se barruntaba. Fue uno de los dos eliminados de la noche. Él y Palito Dominguín, doble marcha justa. Blanca Romero y su linda simpatía se quedaron en el programa. Porque dan juego, claro. El brazo de gitano también le salió bien.

Así que ahí teníamos a Toñi hecha una magdalena cuando se produjo un momento delirante con el sello de Eduardo Casanova. El director y actor, que está mostrando una cara irónica y de humor que le hacía falta de cara al gran público, se cortó el delantal. Lo nuevo visto, un crossover entre MasterChef y Maestros de la costura. Se dejó el mandil a la altura del pecho porque con la tela lo convirtió en el trapo para envolver el bizcocho.

Samantha Vallejo-Nágera acudió indignada a ver lo sucedido y reprendió a Casanova: los delantales son un prestigio para los aspirantes, su puesta en escena, ultrajar la prenda es una afrenta.

El joven actor no se había dado cuenta que tenía cerca una tonelada de rollos de papel que son los destinados para la limpieza de las encimeras y todas las labores que fueran necesarias. El jurado, indignado.

Eduardo tuvo que pedir perdón a todo el mundo. Lo siento, no va a volver a ocurrir. Tuvo que pedir perdón a todo el orbe culinario y a la productora.

En Ceuta, donde se desarrollaba la prueba de exteriores, por primera en vez desde que hace siglos se emite este programa el cocinado al aire libre salió correcto y sin grandes sobresaltos. Pero porque había un truco: Pepe y Jordi fueron los directores de cada uno de los equipos, con sentido común y mano dura, claro. El resultado no iba a ser por victoria por equipos,  sino por comportamiento individual.

Jordi Cruz echó pimienta a la prueba eliminatoria nominando a Blanca Romero y Álvaro Escassi y Pepe a  Jorge Cadaval, Palito Dominguín y Miguel Diosdado, que pinchaba con las púas del rascacio. La ganadora por su entrega fue la colombiana Laura Londoño. Ole por ella.

Y en la prueba eliminatoria tocaba hacer cosas que dan grima como casquería, gusanos o insectos. Palito y Diosdado estaban llamados a esa marcha.

Jorge Cadaval y Escassi estaban calmados y la suerte permitió que Blanca Romero recibiera la ayuda de alguien, Daniel Illescas. Y Tania recibió un delantal negro por chivar consejos.

Los eliminados, de todas formas, estaban cantados.

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