En ocasiones, cuando existe alguna dolencia muscular, debido a una mala postura, un golpe o un movimiento brusco, es común usar algún tipo de crema o ungüento. Uno de los más recurridos es el Bálsamo de Tigre. Tiene su origen en la medicina tradicional china. Se elabora a base de plantas, como el mentol y el alcanfor, y su nombre proviene a la propia imagen del tigre, que es de un animal fuerte.

Su uso se extendió durante el siglo pasado y se ha convertido en un producto que se encuentra en la mayoría de las casas del país chino durante varias generaciones.

Bien es cierto que durante una temporada la popularidad de este bálsamo cayó en picado, pero ahora ha vuelto ha estar de moda y se ha extendido por todo el mundo. Así se ha calculado que se venden más de 60 millones de unidades al año.

Esto se debe a que se pueden encontrar en una gran variedad de establecimientos como supermercados, farmacias, herboristerías y muchas tiendas más.

¿Cómo funciona?

Las propiedades principales del Bálsamo de Tigre crea un efecto de engaño en las terminaciones nerviosas gracias al efecto de enfriamiento y calentamiento que ejerce la propia crema. Aunque no hay muchos estudios que certifiquen su eficacia, algunos sí han demostrado que puede ser útil para aliviar el dolor de cabeza por tensión y que aumentan el flujo sanguíneo si se aplica dando un masaje.

Hay que tener cuidado con su aplicación, pues puede tener algún efecto secundario. Los más comunes son el enrojecimiento, picor, sensación de quemazón, irritación de la piel y dificultades respiratoria si se aplica en la zona del pecho. También se puede dar un caso de dermatitis producido por algún tipo de alergia.