Para los aficionados a las caminatas y al Camino de Santiago tienen una opción de hacer un recorrido que está en el sur, ya que la mayoría se desarrollan en la zona norte del país. Una parte del trayecto cruza de lado a lado la provincia de Granada.

Este camino es recomendable hacerlo durante la primavera o el otoño, ya que durante el verano las temperaturas que hay en el sur son bastante más altas que en cualquier camino del norte. De todas formas, el camino que cruza Granada está dividido en etapas que rondan los 20 kilómetros.

La primera etapa se saldrá desde Huéneja y se llegará a Alquife, teniendo una distancia de unos 21 kilómetros aproximadamente. Primeramente se partirá hacia Dólar pasando sobre el puente de la carretera que está junto a la ermita de La Presentación. Al llegar a las eras de trilla habrá que girar a la derecha entre las mismas para continuar en paralelo a la carretera.

Sin llegar a la autovía, hay una pequeña vía que pasa sobre la gasolinera y que lleva hasta un cercado metálico, desde cuya puerta sale el carril que llega a Dólar, un pueblo de sencillo castillo, llamativa iglesia e interesantes baños árabes. Desde lo más alto se puede reconocer el cambio radical de paisaje teniendo el impresionante llano del Marquesado del Zenete, que ha pasado de despensa cerealista a generador de electricidad mediante sus campos eólicos, su central fotovoltaica y su gran central termosolar.

Castillo de La Calahorra

Desde la ermita de San Andrés sale la carretera que tras dejar a la derecha un desvío, continúa recta hacia el oeste para buscar la población de Ferreira, en cuya alcazaba se encuentra el Centro de Interpretación de la Arquitectura Árabe. En el camino de La Calahorra se cruzará la carretera del Puerto de La Ragua, para seguir por un carril que lleva hasta esta población, conocido por su castillo renacentista.

La recta carretera continúa hasta Alquife, localidad con un fuerte pasado minero donde se localiza la corta a cielo abierto más extensa de Andalucía. El mineral de hierro se sacaba por un ramal propio del ferrocarril Linares – Almería hasta esta última ciudad. Tras el cierre en los años 90 hoy se trabaja en su reapertura debido al aumento de precio del mineral.

Hasta aquí sería la primera etapa de este fantástico camino. En Alquife se dispone de estancias y restaurantes para pasar el resto del día y la noche para descansar hasta el día siguiente y continuar el trayecto.