historia

El afilador: la historia de la flauta que se puede escuchar todavía por las calles de Granada

Todavía quedan algunos afiladores por Granada

Todavía quedan algunos afiladores por Granada / Granada Hoy (Granada)

Es posible que alguno de estos días algunos habitantes de la ciudad o de algunos de los municipios de la provincia de Granada hayan escuchado una melodía acompañado, a voz alzada, la palabra afilador. Un sonido que lleva entre muchos granadinos desde su infancia.

Se trata de un trabajo que lleva entre la población varias generaciones. El sonido característico viene de un pequeño instrumento que se le suele denominar el. “Pito de afilador” o “chiflo”. Se trata de una flauta de pan que emite un característico sonido melódico. Esto hace que cada vez que sonase esta flauta la gente sepa que ha llegado el afilador.

El trabajo consiste en, mediante una rueda de piedra, va afilando distintos utensilios de metal comunes en las casas como los cuchillos. También es capaz de reparar diversos objetos como los paraguas, algo que en otro tiempo era muy común.

Este oficio nace en el siglo diecisiete, en la provincia de Ourense. Según la historia un afilador que venía de fuera de España buscaba reparar su piedra. Finalmente acabó encontrando a un carpintero en la población de Ourense que accedió a reparársela y a la vez dibujó un esquema para hacer una réplica para él mismo.

La figura del afilador ha sido muy importante en épocas de miseria. En esos tiempos, al no haber acceso a prácticamente nada, la tendencia era guardarlo todo y, si se estropeaba, arreglarlo en vez de comprar uno nuevo.

Hoy día son pocos los que quedan y los cuchillos se sustituyen antes de arreglarse (solamente se hacen con cuchillos de alta calidad). Considerado un arte, pues es un oficio que requiere una gran técnica, ha sido pieza fundamental en esas temporadas en el que la pobreza de la población, debido a diversos motivos, causaba estragos en las distintas regiones de España.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios