La ruta otoñal de Granada que esconde un castañar centenario "de cuento", cascadas y puentes colgantes

En la localidad de Aldeire, en las faldas de Sierra Nevada y a apenas unos kilómetros de La Calahorra, aparece un ruta que si durante todo el año ofrece una experiencia natural preciosa y llena de estímulos, en otoño se convierte en un verdadero paraje de cuento de hadas. El Castañar de Aldeire arde en colores ocres a partir de septiembre y octubre y puede verse en una bonita ruta circular que recorre el río Benéjar e incluye cascadas y hasta un puente colgante.

Área Recreativa la Rosandrá

La ruta senderista cuenta, además, con el área recreativa La Rosandrá, donde puede dejarse el coche y hacer picnic en sus mesas. Es uno de los lugares favoritos para familias que buscan pasar el día en el bosque y disfrutar de sus vistas y tranquilidad.

El Castañar de Aldeire

Parar en este castañar durante los meses previos al invierno es interiorizar todas las sensaciones del otoño. Los ocres y la brisa ya fría impregnan todos los sentidos y las castañas recuerdan el olor de las brasas que atenúan la humedad y el frío incipiente. Los árboles de este paraje tienen entre 200 y 400 años, enormes y bellos ejemplares que recuerdan la naturaleza semi virgen de esta preciosa zona de la provincia de Granada.

Un bosque "de cuento" tras un puente colgante

Esta ruta es una de las recomendaciones de la Diputación de Granada en su web de Turismo, que catalogan como fácil y apta para casi todos los públicos. Dicen de este bosque que seguramente fuera plantado "durante la romanización de España y que ha perdurado gracias a un exacto equilibrio vegetal".

Definen también este lugar como "un paraje de cuento" al que se llega tras pasar un famoso puente colgante sobre el río Benéjar, es ahí donde, afirman, "los antiguos y señoriales castaños irrumpen por todos lados y comparten espacios con serbales y álamos".