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La Alhambra esconde siglos de historia tras sus muros y bajo su suelo. Es por eso que todavía, y gracias a los descubrimientos de los investigadores, que cada cierto tiempo aparezcan nuevas historias o teorías sobre alguna de sus torres o palacetes.
Durante los meses de más calor los sultanes y todo su séquito se trasladaban a esta zona rodeada de vegetación, terrazas y el elemento principal de la Alhambra: el agua.
En esta conocida torre se dice que Bobadil salió a dar las llaves a los Reyes Católicos. Se llama así por la creencia de que tiene 7 pisos subterráneos. hasta el momento se han hallado solamente dos.
El palacio cuenta con alrededor de 16 kilómetros de túneles y pasadizos que van por todo el subterráneo de la Alhambra. Tenía varias funciones: desde servir de defensa, lugar estratégico militar o como ruta de huida para el sultán y su familia en caso de que corrieran algún peligro.
La Alhambra está repleta de hermosos jardines. Todavía se conservan algunos árboles que daban sombra a los sultanes que vivieron en el palacio. Toda esta vegetación se conserva gracias a la gran labor que realizaron para llevar hasta allí el agua que pasa por el río Darro.
Se habla de que la propia Alhambra actúa como un enorme reloj de sol. Estos se observa especialmente en la Torre de la Vela que está orientada a los cuatro puntos cardinales. Esto servía a los habitantes de la ciudad de Granada para orientarse.
Es un hecho que es uno de los trabajos arquitectónicos más impresionantes del mundo. De esta forma se le llamó la fortaleza indestructible, ya que aseguraban que ningún ejército era capaz de derribar la fortaleza. Es por eso que se dice que sí la Alhambra a caído es porque ha llegado el fin del mundo.
Este gran palacio está construido de tal forma que hacía que las personas a cargo de distintos estamentos no se cruzaran. Las reuniones de estos altos cargos se hacían en el patio del palacio, donde el sultán escuchaba las súplicas.
Si hay un elemento que destaca durante gran parte del recorrido por el monumento son las fuentes. Estos no son meros accesorios decorativos. Forman parte de la arquitectura de los palacios y del espíritu de belleza que impregna todo. La disposición y variedad de fuentes que sirven para conducir el rumor del agua a través de patios, palacios y jardines. De esta forma es difícil pasear por la Alhambra sin tropezar con alguna alberca, fuente o pilar con el sonido del agua como protagonista.
Hay estancias que tienen una decoración con gran nivel de lujo y detalle. El sultán Mohammed V es reconocido por haber tenido una estancia que, aparte de tener su trono, estaba decorada por muebles de las mejores maderas, telas traídas de los mejores puertos del Mediterráneo y vidrieras que cerraban las balconadas que se asoman a los jardines.
Hay distintas teorías sobre el origen de la famosa fuente y qué es lo que representa. Según estudios puede estar evocando al Mar de Bronce de Jerusalén. Por otro lado apuntan que podría ser un reloj de sol por la disposición de los 12 leones. También, atribuyéndose la autoría a los judíos, hablan de una representación para simbolizar las casas de los poderosos.
Las paredes de la Alhambra está repleta bellos y trabajados ornamentos. Su función, aparte de estética, era la de impresionar a los grandes reyes que visitaban el palacio.
La Alhambra cuenta con unos baños en el que hoy día todavía se puede sentir la humedad. Esto es gracias a su construcción y a la maestría de llevar el agua hasta allí. En estas salas, en los últimos años previos a la conquista, se reunían los gobernantes para tomar decisiones mientras se relajaban.
El complejo de la Alhambra es bastante amplio. Es po eso que hay zonas en las que el acceso del visitante está restringido debido a la complejidad de la zona, como los subterráneos de la Alcazaba.
Los árabes eran conscientes de la importancia del agua. Esto es debido a que ellos proceden de tierras en las que el agua escasea, con lo que se eran expertos en sistemas para obtener este necesario elemento. Así, mediante un complejo sistema de ingeniería, consiguieron llevar el agua que lleva el río Darro por todo el complejo. Un trabajo digno de elogio.
De momento no está demostrado este hecho pero hay indicios que indican que Boabdil, último sultán del renio nazarí, antes de la conquista de Granada por los Reyes Católicos en 1492, escondió en un lugar todavía desconocido de la Alhambra un gran tesoro.
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