"Imagina un lugar donde nada es imposible". Un escueto preámbulo que describe a la perfección el contenido de Cuarto Milenio. La exposición, que podrá visitarse hasta el próximo 11 de diciembre en la Feria de Muestras de Armilla (Fermasa).

Iker Jiménez y Carmen Porter, presentadores del conocido programa televisivo Cuarto Milenio, aterrizaron el pasado viernes en Granada para presentar la undécima edición de una exposición que está haciendo las delicias de todos los seguidores del programa y su peculiar trama paranormal.

El contenido de esta muestra de lo lúgubre y lo oculto no vería la luz sin la indispensable mano de obra de Juan Villa, el escultor y artesano encargado de reproducir al milímetro las numerosas piezas que conforman la exposición. "Juan es el gran protagonista de la exposición, sin él no podríamos haber creado este evento único en el mundo", añadió Iker Jiménez durante la visita que brindó a los periodistas.

El pasaje hacia el misterio comienza en el aljibe ubicado en la entrada de Fermasa, donde 'los visitantes' aguardan bajo una sideral luz azul, que adentra al espectador en terreno cósmico. Para alcanzar las siguientes áreas, dos gigantes venidos de la antigüedad sirven como anfitriones de la segunda fase de la exposición.

"Para que nos entendamos, estos dos titanes que recrean a los gigantes del monte Prama, podríamos considerarlos los C3PO de la antigüedad", comentó el presentador, que siempre guarda un espacio para aludir el tema marciano. Por su parte, Carmen Porter, incidió en que "el objetivo inicial de esta exposición siempre ha sido que la gente se retrotrajera a su alma de niño".

Una retrospección que dio paso a la sala de 'los clásicos', donde un desvaído Nosferatu o un siniestro Padre Benito de Granada perseveran estáticos a que lleguen los amantes de la tercera fase contemporánea. Especial mención al Padre Benito, alias 'El fantasma de la Diputación de Granada', al que la pareja Jiménez-Porter guarda una especial predilección.

No obstante, el misterio no acaba aquí, las áreas temáticas de la que se compone la exposición se dividen en diez: Bélmez, un espacio dedicado al fenómeno de las caras del municipio jiennenses; la criptozona, dedicada a la misteriosa zoología a lo largo de la historia; mundo insólito, con las creaciones más disparatadas realizadas por los genios olvidados españoles; área CSI, donde tomarán protagonismo las investigaciones forenses en torno a las muertes más sonadas de la civilización; en busca de los dioses, desde la prehistoria hasta la actualidad; chamán, muestras de los distintos intermediarios con el más allá, así como la muestra de momias y un terrorífico espacio para los muñecos malditos.