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Una gran pared sin descanso

  • Medir la distancia del esfuerzo es la clave para no ceder tiempo en el corto pero explosivo Cumbres Verdes

Hoy es un día grande en La Zubia. El nombre de la localidad se pondrá en el escaparate mundial a eso de las cinco y cuarto de la tarde cuando los ciclistas de la ronda española se enfrenten al primer final en alto de la carrera. Cumbres Verdes. Para los granadinos un lugar de esparcimiento de sobra transitado y que sirve de puerta de entrada al Parque Nacional de Sierra Nevada, será ahora conocido globalmente.

Después de la espectacular llegada que la Vuelta preparó en Hazallanas el año pasado, en esta edición la provincia volverá a ser un plato fuerte y no uno combinado. La subida a Cumbres Verdes es corta, pero lo suficientemente dura como para abrir las primeras diferencias entre los candidatos al podio en Santiago de Compostela.

Si algo caracteriza la etapa que hoy discurre por Granada y sube a lo más alto de La Zubia es la palabra traicionera. No será decisiva, tanto por las alturas de carrera (sexto día) como por la exigencia del trazado, pero sí la que puede empezar a descartar favoritos.

Los corredores entrarán por la provincia a través del mítico Boquete de Zafarraya (15:12 como muy pronto), un puerto de segunda categoría de poco más de doce kilómetros pero relativamente cómodos. Luego, llegarán a las inmediaciones de Granada (17:06) previo paso toda la comarca del Temple y coronando, en última instancia, Los Bermejales (tercera). Se trata de un terreno propicio para que una escapada haga su agosto (nunca mejor dicho), y que además tenga muchas opciones de triunfo por la cortedad de la última subida. La batalla por la general llegará tras la entrada del ganador, seguro.

El mejor horario previsto por la organización para empezar el ascenso a Cumbres Verdes son las 17:20 horas. La ascensión son cinco kilómetros que se pueden hacer muy largos si alguien decide atacar. Y es que esta subida tiene dos características que la hacen muy virulenta: es totalmente recta, lo que da la sensación de poco avance y no tiene curvas en las que descansar, y desde que abandona el caso urbano de La Zubia es asfalto es viejo, con lo cual se agarra mucho en las bicicletas de carretera. Si le añaden las altas temperaturas previstas, más de uno puede caer si no hidrata o come cuando deba.

Su pendiente media es del 7,8 por ciento con picos del 10 a mitad de subida y uno del 12,78 (pendiente máxima al kilómetro y medio del inicio del puerto. Apunten posibilidades: con Contador sufriendo con su lesión aún fresca, Froome parte como favorito. Pero sólo son cinco kilómetros. Quintana deberá estar con él, y a Valverde y, sobre todo 'Purito' le vienen de lujo este tipo de rampas.

Lo que es seguro es que la afición y los ciclistas volverán a dar espectáculo. Granada sólo pone la geografía. ¡Menudo marco!

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