El entrenador del Cajasol, Joan Plaza, ya piensa en la próxima temporada, para la que quiere contar con Pablo Aguilar. El pívot del Club Baloncesto Granada, que en septiembre cumplirá 21 años, debutó en la ACB de la mano del técnico catalán, en el curso 06-07, cuando ambos coincidieron en el Real Madrid. Entonces, el jovencísimo Aguilar pudo disfrutar de algún minuto testimonial en la élite.

Fue hace dos veranos cuando el CB Granada acometió la contratación de Aguilar. Lo fichó por cuatro temporadas, a sabiendas de la tremenda proyección del ala-pívot de 2,04 metros. Sin embargo, el Real Madrid obligó a incluir una cláusula en el contrato por la que podía repescar al jugador al cabo de dos años, fecha que se cumple a partir del próximo junio. Habrá que ver los planes de Ettore Messina, pues la vuelta al equipo blanco no costaría ni siquiera 100.000 euros, una minucia para Florentino Pérez.

Aparte de su calidad como jugador, su condición de seleccionable y el futuro que le espera son virtudes que valora muchísimo Plaza, que ya ha comunicado a al director general y al director deportivo del club hispalense, Leo Chaves y a Juan Llaneza, respectivamente, que negocien con los agentes Aguilar para ver las opciones de que recale en las filas del Cajasol.

Aguilar, que jugará precisamente este sábado en Sevilla contra el Cajasol, tiene garantizadas dos temporadas más en el CB Granada en el caso de que los madridistas no hicieran efectiva la mencionada cláusula. En Sevilla se confía en que llegado el caso, debido a la mala situación económica por la que atraviesa la entidad nazarí pueda haber interés en hacer negocio con uno de sus principales activos con el que sin duda es un ídolo para los aficionados locales.

El año pasado ya hubo informaciones que apuntaron a que el Madrid intentó recuperarlo con el fin de hacer un trueque con el colegial Carlos Suárez, a quien sí quería Messina, aunque finalmente no cuajó. También algunas fuentes señalan que Oriol Humet, cuando recaló en el Cajasol procedente del CB Granada quiso que firmara en Sevilla, aunque sin éxito.

Pablo Aguilar lleva las dos últimas temporadas rayando a gran nivel en el conjunto que entrena Trifón Poch. De hecho, esta campaña es un fijo en el cinco inicial y goza de muchos minutos, aunque últimamente brilla menos, precisamente desde que salió de la lesión que se produjo en el tobillo izquierdo en los últimos días de 2009.

Su experiencia en el CB Granada, su talento, su condición de seleccionable y su perfil de jugador interior que juega perfectamente de cara al aro y con un buen tiro de tres son razones de peso por las que Joan Plaza lo quiere a su lado.