Los vecinos de Zaidín quisieron escuchar ayer al resto de habitantes del barrio que no se han manifestado públicamente ni a favor ni en contra del cambio de uso de la Biblioteca de las Palomas y la mejor manera que se conoce en democracia para lograr este objetivo es el referéndum. Esta ha sido la última actuación que ha planteado la plataforma contra el cierre del centro de lectura para convertirlo en la nueva sede de los coros y danzas municipales, un destino final que, dicho sea de paso, no acaba de llegar, a pesar de que el local lleva ya ocho meses cerrado.

El mismo número de meses lleva la Plataforma contra el Cierre de la Biblioteca de las Palomas organizando todo tipo de actos de protesta, siempre "pacíficos y creativos", como destacaba ayer una de sus portavoces, Gloria García de Quevedo. "Este referéndum es un acto simbólico, no se trata de una recogida de firmas oficial. Eso ya lo hicimos y presentamos al Ayuntamiento más de 10.000, pero no sirvió de nada", señalaba ayer esta profesora jubilada que ha dado clases en varios institutos del popular barrio y que es uno de los rostros más representativos de este movimiento social que ha logrado reunir a personas de las más diversas edades, profesiones o procedencias.

A las firmas de apoyo a la plataforma también se han sumando nombres de personalidades de la cultura local y nacional como Antonio Muñoz Molina, Luis García Montero, Rosa Regás, Miguel Ríos, Juan Vida, Andrés Neuman, Ángeles Mora, Juan Pinilla o Juan Mata.

Y otra prueba más de su diversidad es que ayer a mediodía junto a Gloria García vigilaban la recepción de papeletas Mónica Ortega, una estudiante de Biología de 23 años, y Asunción Ibáñez, una psicóloga de 30. Ellas eran dos de las voluntarias que se habían organizado en varios turnos para atender la urna, que se instaló desde las 9:00 horas hasta las 14:00 horas en la Plaza de las Columnas en la Avenida de Dílar y por la tarde de 17:00 a 18:00 horas en la Plaza de las Palomas. Allí comenzó a esa misma hora una asamblea para hacer un balance de la actividad y presentar el proyecto de la Biblioteca, así como nuevas propuestas para futuras actuaciones de la campaña 12 meses, 12 razones por la reapertura.

La plataforma, que imprimió en las papeletas la pregunta "¿Quiere que se reabra la Biblioteca de las Palomas", saldó el referendum con 758 votos a favor, uno en contra y tres nulos.

Hasta la fecha han intenado exponer, sin éxito a los responsables de la decisión del cierre, el alcalde y el concejal de Cultura, su proyecto para la reapertura. Pero, como recordó García de Quevedo, no se han atendido ni a las peticiones que han presentado en el registro ni a las que han hecho públicas en los medios de comunicación. La propuesta que se expuso ayer en la Asamblea, como ya se había manifestado en anteriores ocasiones es que la biblioteca siga funcionando con un bibliotecario municipal y la colaboración de los becarios de la Facultad de Documentación, "que ha prestado su colaboración a la iniciativa", como recordó la profesora.