El simple gesto de lavarse las manos previene de múltiples enfermedades. Esto es algo que caló en la población cuando surgió la alerta por la gripe A, época en la que se instalaron dispensadores de jabones especiales por hoteles, oficinas, ascensores... Sin embargo, en los últimos tiempos parece algo olvidado, aunque su vigencia para este y otros males sigue intacta. No sería así si existiera una mayor conciencia de su importancia, ya que lo que desconoce la mayor parte de la población es que algo tan sencillo puede salvar la vida de numerosas personas. Esta afirmación, aunque parezca exagerada, fue realizada ayer por personal sanitario en el Hospital de Motril. En dicho centro se realizó la conmemoración de la IV Jornada Mundial de Higiene de Manos, a la que el Área de Gestión Sanitaria Sur se ha adherido desde hace semanas con diversas actividades de sensibilización dirigidas a profesionales, escolares, pacientes, familiares y ciudadanía en general.

La doctora especialista en Medicina Preventiva y de Salud Pública Amalia Ramos, que fue la encargada de la charla de promoción de esta iniciativa, señaló que el objetivo es "sensibilizar a los profesionales sanitarios y a la población en general de la importancia que tiene una correcta higiene de manos para prevenir infecciones, que provocan una alta morbilidad y mortalidad no deseada en los pacientes".

Con el lema 'Salvar vidas está en tus manos', dicho área realiza una campaña para mejorar la higiene de esta parte del cuerpo que, aunque parece simple, supone una de las medidas más eficaces para reducir las infecciones relacionadas con la atención sanitaria y también requiere de una técnica.

Las soluciones alcohólicas que se venden en supermercados, droguerías o farmacias son adecuadas para este acto de higiene, sin embargo, según comentó Ramos, suele fallar la manera de lavarse las manos. "Debe durar entre 40 y 60 segundos y cubrir la mayor parte de los dedos y los nudillos, partes que se suelen olvidar, el secado se tiene que realizar con toallas de papel de un solo uso porque si no se vuelven a contaminar y, por último, no cerrar el grifo con la mano limpia", explicó esta especialista.