Las obras del Metro de Granada esperan a las puertas de Renfe para continuar el trazado. La indefinición del proyecto para la nueva estación de AVE en la ciudad, del que aún no se conoce ni su ubicación definitiva, ha provocado nuevas modificaciones en la planificación del Metropolitano, además del retraso en la ejecución de los trabajos por los terrenos ferroviarios.

La empresa que se encarga de construir el tramo del Metro a su paso por la estación está trabajando ahora, tanto por los Paseíllos Universitarios como por la Avenida de Andaluces. Es decir, a ambos lados y hasta el mismo límite de los terrenos ferroviarios, que se han quedado en medio, como una isla, a la espera de que el organismo estatal de infraestructuras ferroviarias, Adif, dé su autorización para comenzar a ejecutar las obras del Metro en esos terrenos.

Hasta ahora la proyección de la entrada del AVE y su estación en la capital había condicionado el trazado del Metro. Por un lado se cambió buena parte del recorrido para que entrara por La Caleta, atravesara la estación por su parte Sur y bajara por Severo Ochoa. Esta novedad se introdujo sobre el proyecto inicial, que estaba previsto por todo el Camino de Ronda desde Villarejo hasta el Zaidín.

El cambio, de más de 30 millones de euros de incremento para el presupuesto, perseguía garantizar la conexión directa de los viajeros que se bajaran del AVE en Andaluces. A día de hoy no se sabe aún si esta cambio servirá para algo, pues la ubicación de la estación de alta velocidad está sin definir. El alcalde de la ciudad, José Torres Hurtado, ha propuesto que se traslade el apeadero al Cerrillo de Maracena, en la Rotonda Europa. En esa zona también podría haber conexión con el Metro, que pasa en superficie a escasos metros de allí.

Luego hubo un segundo cambio. El proyecto del arquitecto Rafael Moneo para hacer una estación de AVE semisoterrada condicionaba también el trazado del Metro a su paso por los terrenos de la estación, pues impedía que las vías cruzaran en línea recta por la superficie. Esa zona estaría ocupada por una cubierta de cristal que estaba previsto que tapara la playa de vías y los andenes.

De ahí que se proyectara un nuevo trazado alternativo para el Metro, que era una especie de bypass o recorrido en forma de U para sortear los andenes del AVE.

Pese a que la nueva estación está sin definir, lo único que parece claro es que el proyecto de Moneo está descartado, entre otras cosas por el alto coste que tenía. La consigna ahora es encontrar una solución para la alta velocidad que sea rápida y barata. Por eso se maneja tanto la opción propuesta por el alcalde como la de hacer un remozado de la actual estación de Avenida de Andaluces, lo que supondría que las vías siguieran en superficie, con los problemas de integración urbana que esto supone, especialmente para La Chana.

De cualquier modo, al quedar descartada la opción de Moneo, los responsables de ambas infraestructuras han acordado anular la construcción de ese bypass que tenía un coste adicional de unos 7 millones de euros. Ahora está previsto que las vías crucen en línea recta por los terrenos de Renfe y se haga allí una parada de Metro.

No solo es un ahorro económico, si no que , al ser el trazado más recto, es el más cómodo y rápido para los futuros viajeros del Metro, que no tendrá que rebajar su velocidad para afrontar esas curvas.

Esta solución está consensuada, aunque ahora faltan los trámites de adaptación de los proyectos y la autorización de Adif para comenzar a trabajar. Mientras esto se desarrolla, que puede tardar varios meses en el mejor de los casos y si no hay problemas añadidos, las vías del Metro no podrán pasar de la puerta de Renfe.

Dado que las obras del Metro están en marcha y no pueden esperar, el trazado de estas vías se hará del modo más lógico y recto posible, sin los condicionamientos de la futura estación que estaban previstos antes. Será el AVE el que habrá de adaptarse al trazado del Metro para garantizar la intermodalidad, tanto si la dársena se construye en Andaluces como en Cerrillo de Maracena.