Despúes de un mes de pruebas en la Línea de Alta Capacidad, más conocida por los granadinos como la LAC, hoy ha empezado a funcionar con normalidad, y esto quiere decir que, a partir de ahora, esta línea cobrará por sus servicios con el mismo precio que el resto de los autobuses.

Durante este periodo de prueba, la línea se ha utilizado de forma gratuita para que todos los viajeros se acostumbraran a la nueva distribución de las líneas de autobús, conocieran las paradas de las mismas, dónde ubicar las líneas y transbordos que más les interesaran y, como ha resaltado la concejal de Movilidad, Telesfora Ruiz, este tiempo también ha servido para "educar a los pasajeros en los nuevos pasos a seguir antes de utilizar la Línea de Alta Capacidad".

Para ello, la Rober puso a disposición de los viajeros inspectores en las paradas y autobuses de esta línea, aunque Ruiz los califica más bien como "informadores" y cuyo objetivo no es otro que enseñar a los usuarios cómo utilizar este nuevo medio. "La actividad de estas personas toma un valor importante" declaró Telesfora Ruiz puesto que han sido ellos los encargados de hacer que la ciudadanía se adaptara a las exigencias de esta nueva línea de autobuses.

Como ya ha resaltado Telesfora Ruiz en numerosas ocasiones, el balance de la LAC es "cada día mejor" debido a que la ciudadanía ya se ha acostumbrado a esta nueva línea pero es cierto que en esta nueva etapa, "habrá un 20% de la gente que lo utilizaba hasta ahora que no lo hará a partir del viernes [por hoy]" afirmó Ruiz. El motivo de esta reducción es que hasta ayer, esta línea era gratuita y por este motivo, y para evitar el calor, eran muchos los que la utilizaban para realizar trayectos cortos. " Una vez que sea de pago, la gente volverá a realizar algunos trayectos a pie" aseguró la concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Granada. Además, reconoció que se han registrado algunos tramos y horarios de masificación pero "ha sido en situaciones puntuales". El funcionamiento de la línea es semejante al de otros medios de transporte y está implantada en ciudades como Barcelona. Una vez que se llegue a la parada, ticarás tu bonobus en las máquinas validadoras y, de este modo, podrás acceder al autobús por cualquiera de las cuatro puertas. Este proceso también hará que se agilice la actividad cuando llegue el autobús ya que todo el mundo "habrá validado su viaje y la espera es mínima debido a la regularidad de la línea". Recordó Telefora Ruiz que "la segunda de las puertas está reservada para personas con silla de ruedas o para los carritos de bebés ya que cuenta con un espacio justo ahí asignado para ellos y que permite que se puedan mover mejor por el autobús".

La concejal de Movilidad está convencida de que "este nuevo hábito requiere de un tiempo de adecuación" y por ello "se han puesto las máximas facilidades para los usuarios" pero también recuerda que a partir de ahora es necesario seguir las instrucciones de uso de estas líneas.

La penalización por no usar de forma correcta la LAC, "como el resto de líneas y transporte público está recogido en una ordenanza municipal" afirmó Ruiz. La sanción por acceder a la línea sin haber ticado previamente tiene un coste de 40 euros y se cobrará en el momento, ya sea en metálico o por tarjeta. "Si no se abona en el momento, la sanción se transmitará y se comenzará con un proceso de denuncia como en cualquier otro caso" certificó la edil de Movilidad.

Por otra parte, según la parlamentaria Andaluza, Ana Vanessa García, y y el vicesecretario de Política Municipal, José Antonio Robles, los problema de movilidad que se le atribuyen a Granada tienen su origen en los "incumplimientos por parte de la Junta de Andalucía" en la finalización y puesta en marcha de los servicios del Metro. Esta falta de acción en los proyectos hace que se influya de manera negativa en el transporte metropolitano de la ciudad.